Preocupación entre los líderes de la UE ante el anuncio de Irán de retomar su programa nuclear

La Unión Europea ha manifestado una gran preocupación ante el anuncio de Irán de suspender su compromiso con el acuerdo nuclear de 2015 y retomar su programa de armamento. Las autoridades iraníes realizaron ayer el anuncio, en medio de la gran escala que ha seguido al asesinato del general Qassem Soleimani. El gobierno iraní ha expuesto que reducirá sus compromisos en el marco del acuerdo nuclear de 2015, pero continuará cooperando con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).

Los líderes de Alemania, Reino Unido y Francia no han tardado en responder al anuncio, exponiendo su preocupación e instando a Irán a continuar con el Acuerdo Nuclear. En una comunicación conjunta, Angela Merkel, Emmanuel Macron y Boris Johnson han instado a Teherán a colaborar en una desescalada de la situación que aleje el riesgo de un posible conflicto bélico.

«Ahora es crucial reducir la escalada», afirman los líderes de Alemania, Francia y Reino Unido en su comunicado. Así mismo, se muestran dispuestos a «continuar las conversaciones con todas las partes para contribuir a reducir las tensiones y restablecer la estabilidad en la región».

Reunión de urgencia de la UE

Ante el rápido deterioro de las relaciones diplomáticas, Bruselas ha decidido convocar una reunión de los ministros de exteriores de los estados miembros de la Unión Europea de cara a plantear una posición común. La reunión, que tendrá lugar, según han anunciado fuentes diplomáticas, el próximo viernes, busca concretar estrategias de cara a reencaminar el conflicto mediante la vía diplomática.

Reducción progresiva de los compromisos

La reducción de los compromisos por parte de Irán con el Acuerdo Nuclear de 2015 comenzó como respuesta a la retirada unilateral de Washington en mayo de 2018 y la imposición unilateral de sanciones.

Teherán ha instado a la Unión Europea a que brinde alivio a las amplias sanciones impuestas por Washington. Las autoridades iraníes han advertido repetidamente que reducirán gradualmente sus compromisos bajo el acuerdo si esto no sucede. En ese sentido, Rohaní anunció en mayo pasado que su país dejaría de cumplir con dos puntos del JCPOA.

A principios de julio, Irán activó la primera fase de esta estrategia al suspender la venta de uranio enriquecido y el excedente de agua pesada, como lo estipulaba el JCPOA. La segunda fase ―enriquecimiento de uranio a más del 3,6 %, el nivel establecido por el convenio― se realizó poco después.

Posteriormente, en septiembre, Irán dio un tercer paso en su progresivo alejamiento de sus compromisos derivados del acuerdo nuclear internacional. El país puso en funcionamiento 20 centrifugadoras IR-4 para enriquecer uranio en vez de las 10 que están permitidas en virtud del Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés).

Finalmente, en noviembre pasado, el presidente iraní, Hasán Rohaní, anunció que Teherán da un nuevo paso para reducir sus compromisos en el marco del acuerdo nuclear y empieza a inyectar gas en 1.044 centrifugadoras que se encuentran en el complejo nuclear de Fordow. En el marco del acuerdo nuclear firmado en el 2015, a Teherán se le permite poner en marcha las centrifugadoras en cuestión, pero deben girar sin el uso de gas.