La tormenta Beryl se desplaza sobre la península de Yucatán

El fenómeno meteorológico que, por el momento no causó ninguna muerte en suelo mexicano, aunque sí estragos materiales, continúa su desplazamiento hacia el oeste-noroeste a 24 kilómetros por hora.

Beryl mantendrá lluvias puntuales torrenciales de 150 a 250 milímetros en Campeche, Quintana Roo y Yucatán, e intensas (de 75 a 150 milímetros) en Chiapas y Tabasco.

La entidad alertó en su más reciente boletín que las precipitaciones están acompañadas de descargas eléctricas y podrían «generar encharcamientos e inundaciones en zonas de los estados mencionados».

Exhortó a la población, a los turistas y a la navegación marítima, a atender los avisos del Servicio Meteorológico Nacional, de la Comisión Nacional del Agua, seguir las recomendaciones de Protección Civil y extremar precauciones ante las lluvias, viento y oleaje elevado.

Según la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, «se está restableciendo la normalidad. Hay saldo blanco, la prevención del trabajo de tantos días resultó benéfica».

En conferencia de prensa tras el paso del ciclón, añadió que en el estado de Quintana Roo, las autoridades y empresas trabajan en la normalización de los servicios y la apertura de establecimientos, en especial en las zonas turísticas.

El Aeropuerto de Cancún reinició operaciones cerca de las 12:00, hora local, con 281 vuelos programados.

Beryl, que llegó a ser de fuerza 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson, durante su paso por el sur del Caribe, tocó hoy tierra mexicana con categoría 2 en un área al norte de Tulum, en el estado de Quintana Roo.

Hasta ahora se reportan inundaciones, caídas de árboles y afectaciones menores en las construcciones de madera, así como falta de fluido eléctrico en algunos barrios.

La Guardia Nacional, tras el paso de Beryl, mantiene activo el de auxilio a la población, para apoyar a la ciudadanía afectada por las intensas lluvias.