La policía francesa detiene a 278 manifestantes en París antes de iniciarse las movilizaciones de los chalecos amarillos
El Gobierno francés ha desplegado a 89.000 agentes de seguridad en todo el territorio francés para contener las movilizaciones de los Chalecos Amarillos, 8000 de los cuales están destinados a París.
Al menos 278 personas han sido detenidas esta mañana en París antes del comienzo de la movilización de los Chalecos Amarillos en el cuarto sábado consecutivo de estas movilizaciones iniciadas ante la decisión del gobierno de Emmanuel Macron de encarecer el precio del combustible con una nueva tasación indirecta.
Fuentes policiales indicaron que los ciudadanos fueron arrestados por las sospechas que podrían formar parte de supuestos grupos organizados para cometer actos violentos y por estar en posesión de objetos que pueden utilizarse para ello.
La Policía señaló que los detenidos no quedarán bajo custodia una vez que se realicen las verificaciones pertinentes. El ministro del Interior de Francia, Christophe Castaner, justificó el operativo de seguridad para impedir que se reproduzcan los disturbios del sábado pasado: «Hemos tenido que dar una respuesta fuerte».
El Ejecutivo francés ha anunciado la movilización de 89.000 policías y gendarmes en todo el país. De ellos, unos 8000 han sido destinados a París, según ha informado el primer ministro galo Édouard Philippe.
Como medida de seguridad la Policía cortó el tráfico en las principales zonas de concentración de los Chalecos Amarillos como el barrio de los Campos Elíseos, las plazas de la República y de la Bastilla para evitar incidentes violentos.
Desde el inicio de las manifestaciones de los Chalecos Amarillos el pasado 17 de diciembre, el Gobierno ha usado las fuerzas de seguridad para reprimir la protesta social que demanda la renuncia del presidente Emmanuel Macron y un cambio en la política económica.
Polémica por la actuación policial
El uso de la fuerza y las medidas de contención aplicadas por las fuerzas policiales y los antidisturbios franceses han generado una oleada de críticas en el país. El anuncio esta semana de la detención de 146 en escuela secundaria de Mantes la Jolie, en las afueras de París, se ha viralizado, convirtiéndose en un símbolo de la desproporción de las medidas policiales.
En el momento de la detención, los policías obligaron a los menores a arrodillarse, con las manos en la nuca e incluso hubo algunos jóvenes esposados de cara a un muro. El hecho se viralizó en redes sociales y defensores de los derechos humanos consideran abusivo y humillante el trato dado a los estudiantes, ya que la mayoría de ellos están entre 14 y 18 años de edad.