La oposición sudanesa llama a la «desobediencia civil» tras las últimas detenciones del Consejo Militar
El Consejo Militar conformado tras el golpe de estado que el pasado 11 de abril expulsó del poder a Omar Al Bashir ha desoído las movilizaciones y exigencias de conformar un gobierno civil. Las últimas detenciones han precipitado la ruptura con la oposición que ha acusado al ejército de traicionarles y ha llamado a la insubordinación pacífica.
Líderes de la oposición en Sudán llamaron a la «desobediencia civil» a partir del domingo para protestar por la represión brutal que sufrieron los manifestantes esta semana. «La verdadera desobediencia (civil) empezará a partir del domingo y solo se terminará cuando se anuncie un gobierno civil» indicó la Asociación de Profesionales Sudaneses (SPA), el principal grupo opositor en un comunicado.
Este llamamiento se produce un día después de la visita a Jartúm del Primer ministro etíope Abiy Ahmed, el cuál llegó como mediador entre los manifestantes y el Consejo Militar de Transición, en el poder desde la destitución del presidente Omar Al Bashir el 11 de abril y apoyado por Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos.
También ocurre cinco días después de la violenta dispersión por las fuerzas de seguridad de una acampada organizada desde el 6 de abril frente al cuartel general del ejército en Jartúm, como prolongación del movimiento de protesta iniciado en diciembre.
Calificada de «masacre» por los manifestantes, fue seguida por una ola represiva esta semana. Según médicos cercanos a la protesta, más de 100 personas murieron y más de 500 resultaron heridas, en su mayoría durante la reresión del acampe. El gobierno negó esas cifras y dio un balance de 61 muertos.
Desobediencia civil
Para la SPA, la desobediencia civil constituye «un acto pacífico capaz de hacer arrodillar al más poderoso arsenal de armas del mundo».
Esta nueva forma de acción también se da tras dos días de huelga general, el 28 y el 29 de mayo, para presionar al ejército.
La forma que va a tomar esta «desobediencia civil» no ha sido precisada todavía, y las calles de Jartúm están casi desiertas desde el lunes por la represión.