Marina Albiol: “Si la UE quiere conmemorar el Día de los derechos humanos, debe empezar por cumplirlos”

La portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, Marina Albiol, ha cargado con dureza contra la Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini, por sus palabras en un comunicado para conmemorar del Día de los derechos humanos, que se celebra el próximo sábado. La eurodiputada cree que este último año ha puesto de manifiesto la “total falta de credibilidad de la UE” en la materia y recomienda a la jefa de la diplomacia europea que “mire a su alrededor y diga si realmente tiene algo que celebrar”. “La UE, para conmemorar el día de los derechos humanos, debe empezar por cumplirlos”, ha dicho.

Mogherini envió ayer un comunicado en nombre de la UE en el que resalta la importancia de “redoblar” los esfuerzos “para defender los derechos de todos” y sumarse al llamamiento de Naciones Unidas para “defender los derechos de alguien”. Asimismo, la Alta Representante ensalza el trabajo de la UE en la defensa de los activistas por los derechos humanos en el mundo, poniendo como ejemplo la ayuda económica que reciben 250 personas. Por último, explica que la UE defiende los derechos humanos en todos los foros internacionales y que la nueva Estrategia Global sobre Política Exterior y Seguridad de la UE incluye “garantizar al más alto nivel la protección de los derechos humanos de los migrantes y los refugiados en toda la actuación de la UE en materia de migración y desarrollo”.

“Nos habría gustado que en lugar de hacer un comunicado tan general y vacío de contenido, la Alta Representante hubiera aprovechado la ocasión para hacer autocrítica. Habría sido la mejor manera de llamar la atención al Consejo Europeo, donde los jefes de Estado y de Gobierno de la UE son los que deciden que Europa incumpla los derechos humanos y la legalidad internacional, mientras le dicen al resto del mundo cómo debe comportarse”, ha señalado

Albiol cree que las palabras de Mogherini son “un ejercicio de cinismo difícil de entender” en una persona que “en teoría, debería estar al día de todo lo que sucede en la UE y fuera de ella”. Por ello, ha invitado a la Alta Representante a hacer “un repaso más realista” de la situación, comenzando por los CIE, “las cárceles para extranjeros repartidas por toda Europa en las que se cometen abusos y violaciones de los derechos humanos a diario”.

En su opinión, “tenía una oportunidad de oro para decirle a los Gobiernos que no podemos detener a las personas migrantes por el mero hecho de no tener papeles” y para “criticar los vuelos en los que cada día deportamos a cientos de personas, en condiciones más que cuestionables desde el punto de vista humanitario y muchas veces sin ninguna garantía legal de que no vayan a ser perseguidos a la vuelta a sus países”.

Asimismo, “podría haber explicado que, aunque la UE está prestando ayuda a 250 personas y sus familias perseguidas por defender los derechos humanos, Europa tiene mucho que hacer para evitar que cada día sean asesinados o perseguidos sindicalistas y defensores del Medio Ambiente en todo el mundo”. Esto “ocurre a diario en Latinoamérica”, pero la UE, incumpliendo la cláusula que supedita los acuerdos comerciales al respeto y la defensa de los derechos humanos, “mira a otro lado” y “prefiere no actuar contra las multinacionales europeas” que “son en gran parte responsables y cómplices de la situación”.

La eurodiputada sugiere que Mogherini debería haber aprovechado para “condenar la situación de los presos políticos saharauis en las cárceles marroquíes y exigir su liberación”, conminando al Reino de Marruecos “a permitir que se celebre el referéndum de autodeterminación del Sáhara Occidental que acabe con la ocupación y el expolio”, tal y como marca Naciones Unidas. Asimismo, podría haber mostrado su predisposición “a acabar con el bloqueo israelí a la Franja de Gaza” y “luchar para que el pueblo palestino pueda vivir en dignidad”. “Para ello –ha explicado Albiol- no bastan las palabras, sino que la UE, como en muchos otros casos, debe sentarse con el Gobierno de Israel y decirle que se acabaron los tratos comerciales privilegiados”.

Albiol critica también que la jefa de la diplomacia europea “pase de puntillas por la guerra en Siria” y no cite “ni de pasada lo que está ocurriendo en Yemen”. Allí, “la UE está permitiendo que el intercambio petrolero y de armas de los Estados miembros con Arabia Saudí pesen más que los bombardeos saudíes contra la población civil”.

Para la eurodiputada, sin embargo, “lo peor de todo el comunicado es que Mogherini, por no molestar al Consejo, se pone una venda con el tema de la migración”. “No es posible que la Alta Representante asegure que la UE está involucrada en la defensa de las personas migrantes y refugiadas y a la vez firme acuerdos con Turquía para deportar personas y externalizar las fronteras. No es defender los derechos humanos que la UE obligue a Afganistán a asumir las deportaciones masivas de afganos en suelo europeo a cambio de ayudas al desarrollo” y que “ese mismo juego” se vaya a “convertir en norma con el paquete migratorio que está preparando la UE”, ha denunciado.

Es “inconcebible” que Mogherini no hable de Turquía en ese mensaje “y no reconozca que el país en el que Erdogan bombardea al pueblo kurdo y detiene a periodistas y profesores, no es un país seguro para nadie”.

El problema está, según Albiol, “en que sería necesario empezar por casa”. “Las familias que no podrán encender mañana la calefacción, las que van a ser desahuciadas, los que no tienen ningún ingreso, las mujeres víctimas de la violencia de género, las que en Polonia no pueden abortar o las víctimas de agresiones LGTBifóbicas”, son a su juicio, “un ejemplo claro de las prioridades de la UE”. “Bruselas sigue profundizando en la desigualdad y la pobreza y eso, en sí mismo, Mogherini debería considerarlo una vulneración de los derechos humanos”.

Por último, Albiol ha ironizado con que la Alta Representante tampoco haya citado a Venezuela. “Llevamos dos años y medio disertando sobre la situación de los derechos humanos allí” y “quizá esto tenga que ver un poco con ese comunicado”. “El mensaje parece ser que debemos hablar de otra cosa para que nadie se dé cuenta de que, en realidad, la UE no tiene nada que conmemorar”, ha concluido.