La deforestación disminuye en la sabana y la selva amazónica de Brasil, pero el objetivo cero sigue estando lejos

Después de cinco años de aumentos constantes, la deforestación del Cerrado [sabana brasileña] disminuyó entre agosto de 2023 y julio de 2024, con 8.173 km² del bioma devastados, frente a 11.000 km² en el período anterior. Esto representa una reducción del 25%.

Los datos provienen del Proyecto de Monitoreo de la Deforestación en la Amazonía Legal por Satélite (PRODES, en portugués), que también indica una reducción de la deforestación en la selva amazónica desde 2023. Este año marca la reanudación del Plan de Acción para la Prevención y Control de Deforestación en la Amazonía Legal (PPCDAM, en portugués), creado en 2004 y paralizado durante el gobierno de Bolsonaro. El bioma amazónico experimentó aumentos sucesivos en las tasas de deforestación entre 2018 y 2021. En la evaluación más reciente, en la selva amazónica se eliminaron 9.001 km² de vegetación.

Las cifras fueron presentadas en conferencia de prensa la tarde del miércoles (6) en el Palacio de Planalto, en Brasilia, Distrito Federal. El evento, realizado en vísperas de la COP29, reunió al vicepresidente Geraldo Alckmin, la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático (MMA, en portugués), Marina Silva, la ministra de los Pueblos Indígenas, Sônia Guajajara, además de gobernadores, secretarios del Medio Ambiente, y representantes del MMA y del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE).

«Tiene que ver con el inmenso esfuerzo que ha hecho el IBAMA [Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Renovables]», dijo la ministra Marina Silva, atribuyendo el éxito en la reducción de la deforestación en el Cerrado a la intensificación de las acciones de control, también llevadas a cabo por el Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad (ICMBIO, en portugués).

Respecto a la Amazonia, Silva destaca la efectividad del PPCDAM, que propone monitorear los municipios que más deforestan en el bioma. Actualmente, 70 municipios figuran como los mayores deforestadores. Según datos de PRODES, la deforestación se desaceleró en el 78% de estos municipios durante el período evaluado.

Gracias a los avances en la preservación del medio ambiente, Brasil aún está lejos del objetivo del gobierno federal de deforestación cero para 2030. En una medida reciente, el gobierno del estado de Mato Grosso creó un obstáculo para este objetivo al promulgar una ley que recorta los beneficios para las empresas que son signatarias a pesar de a la Moratoria de la Soja. Este pacto, firmado en 2006, exige que los participantes eviten comprar soja de granjas establecidas en tierras despejadas después del 22 de julio de 2008, en la selva amazónica.

Editado por: Thalita Pires