Unicef rechaza muerte de ocho niños por explosión en Afganistán
En 2020 al menos 3900 niños resultaron fallecidos y mutilados consecuencia de la explosión de artefactos explosivos o remanentes de la guerra.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, siglas en inglés) mostró su rechazo y consternación por los ocho niños fallecidos y otros cuatro que resultaron heridos debido a la explosión de un artefacto de guerra en una escuela en la localidad de Lal Pur, provincia de Nangarhar, Afganistán.
“Unicef expresa sus más profundas condolencias a las familias de las víctimas y heridos”, reflejó el comunicado de representante interina del ente en Afganistán, Alice Akunga.
La funcionaria destacó que este hecho demuestra que esa nación necesita apoyo internacional para retirar los explosivos y otro tipo de artefactos que han quedado consecuencia del conflicto armado.
Asimismo, subrayó la importancia de instruir a los niños (los pobladores más vulnerables) y a las comunidades en general en el riesgo que existe de encontrar material de guerra así como las medidas a tomar en caso de hallar alguno.
Datos ofrecidos por el ente en el comunicado de Akunga revelaron que en 2020 los artefactos explosivos y los remanentes de conflictos fueron causante de la muerte de cerca del 50 por ciento del total de niños fallecidos ese año, lo que significó la muerte y mutilación de al menos 3900 infantes.
Luego de afirmar que las escuelas deben ser un espacio seguro, la Unicef instó a “todas las partes involucradas en Afganistán a tomar medidas concretas para despejar las áreas contaminadas por armas”.
Solo en el primer semestre de 2021 en Afganistán perecieron 460 niños consecuencia del conflicto armado imperante en esa nación.