Prensa Latina •  Redacción •  Internacional •  13/11/2023

La ONU arría su bandera a media asta en su sede en Nueva York en homenaje al centenar de miembros de Unrwa asesinados por el ejército de Israel en Gaza

La bandera de la ONU en su sede en Nueva York ondeará hoy a media asta en homenaje a los humanitarios caídos en Gaza, mientras en todas las dependencias por el mundo se les rendirá tributo.

La ONU arría su bandera a media asta en su sede en Nueva York en homenaje al centenar de miembros de Unrwa asesinados por el ejército de Israel en Gaza

  En las oficinas de Naciones Unidas en el orbe se guardará un minuto de silencio por los miembros de la Agencia para Refugiados Palestinos (Unrwa) víctimas de los bombardeos israelíes, de acuerdo con el anuncio del portavoz del secretario general, Sthéphane Dujarric.

  Hasta el momento, más de un centenar de miembros de la Unrwa perdieron la vida como resultado de los ataques de Israel contra el enclave.

   Entre los fallecidos se encuentran maestros, enfermeras, médicos y personal de apoyo, lamentó al respecto Dujarric.

   La cifra representa el mayor número de trabajadores humanitarios de la ONU muertos en un conflicto en tan poco tiempo, de acuerdo con el secretario general, António Guterres.

   En un período de cuatro semanas murieron más periodistas que en cualquier conflicto en al menos tres décadas y fueron asesinados más trabajadores humanitarios de las Naciones Unidas que en cualquier período comparable en la historia de nuestra organización, dijo Guterres a la prensa.

   Saludó a quienes continúan su labor de salvar vidas a pesar de los abrumadores desafíos y riesgos.

   Tras más de un mes se conflicto, la agresión de Israel cobró la vida a más de 10 mil palestinos, mientras más de 26 mil fueron heridos y otros miles permanecen desaparecidos.

   La situación humanitaria resulta más compleja con más de la mitad de los hospitales de la Franja de Gaza cerrados, en tanto los que quedan están bajo una enorme presión.    Las agencias de la ONU sobre el terreno denuncian escasez de agua, alimentos y combustible que también amenaza el bienestar de miles de personas desplazadas, entre ellas, mujeres y niños que se refugian en hospitales.

jf/ebr


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