Las movilizaciones sociales y huelgas paralizan Francia a 50 años del mayo del ‘68
El gobierno de Macron afronta la contestación de los empleados ferroviarios, estudiantes y organizaciones ecologistas. Las movilizaciones paralizan el país y amenazan con extenderse a otros ámbitos sociales.
Las reformas anunciadas por el recientemente elegido presidente Emmanuel Macron están provocando un levantamiento generalizado en Francia entre los distintos sectores laborales y ámbitos afectados. Su programa de liberalización de sectores estratégicos ha encontrado la respuesta de la fuerte organización de la sociedad civil presente en el país.
Las huelgas de ferrocarriles están paralizando el país por sexto día consecutivo. Las movilizaciones y paros protestan contra la anunciada reforma de la compañía estatal afectan a todo el territorio en un país fuertemente dependiente de los transportes ferroviarios. Los sindicatos convocantes, sostenían el pasado jueves que las huelgas ya habían causado daños a la economía francesa por valor de más de 100 millones de euros.
Sin embargo, a pesar de la presión, el presidente francés ha declarado su intención de continuar adelante con su plan, que prevé la supresión del estatuto laboral específico de los empleados de ferrocarriles. Según el ejecutivo de Macron, la compañía es altamente deficitaria y requiere una reducción de los sueldos de los empleados y la supresión de los beneficios en jubilaciones anticipadas. El plan, así mismo, contempla la apertura a empresas privadas en el sector, pactando los itinerarios principales con la competencia privada a la empresa pública ferroviaria SNCF.
Posiciones frontalmente encontradas que auspician un calendario de movilizaciones prolongado en el tiempo. Para aumentar la contestación al gobierno, esta semana los empleados de la compañía aérea Air France anunciaron que se sumaban a las movilizaciones, causando la cancelación de hasta el 25% de los vuelos y retrasos generalizados, que suponen un problema añadido al sistema logístico y de transportes del país.
Movilizaciones sociales y estudiantiles
Los problemas para Macron no acaban en su pulso contra los empleados de la empresa pública de ferrocarriles. Organizaciones estudiantiles y sindicatos han comenzado un ciclo de movilizaciones contra la anunciada reforma de la ley de acceso a las universidades. Las movilizaciones contra la reforma educativa han dejado escenas de enfrentamientos entre los estudiantes y la policía en numerosos campus universitarios, al tiempo que entidades de la sociedad civil afirman que se están dando episodios de abuso de poder y utilización desproporcionada de la fuerza en la disolución de convocatorias reivindicativas.
Las organizaciones de estudiantes han manifestado su solidaridad con los empleados de ferrocarriles en huelga, evocando la unión de obreros y estudiantes de las movilizaciones de mayo del ’68 de las cuales se cumplen 50 años. Un escenario de protestas generalizadas con estudiantes y trabajadores abriría un frente difícil de superar para el ambicioso plan de liberalización de sectores estratégicos que Macron pretende afrontar en su mandato.