Lo que Trump no entiende (o no quiere entender) sobre la influencia de China sobre Pionyang
China sabe que la defensa y la seguridad de Corea del Norte "no es una moneda de cambio", y no puede forzar a Pionyang a hacer algo que no quiere, explica un analista.
EE.UU. debe dejar de presionar a Pekín en relación con Corea del Norte e idear una nueva política hacia Pionyang, opinó en declaraciones a RT Brian Becker, director de la Coalición ANSWER, organización de protestas en contra de la guerra.
- Donald Trump expresó su descontento con China por no ejercer más presión sobre Corea del Norte después de que Pionyang lanzara por primera vez un supuesto misil balístico intercontinental el pasado 4 de julio.
- En respuesta, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Geng Shuang, denunció que mientras su país «se esfuerza por apagar el fuego», los demás «están alimentando la llama».
«Corea del Norte es un país soberano»
En opinión de Brian Becker, desde el principio Donald Trump «ha exagerado el papel que juega China en la toma de decisiones de Pionyang», puesto que Corea del Norte es «un país soberano», donde «no hay tropas extranjeras, a diferencia de Corea del Sur».
China «nunca tuvo la capacidad» de decirle a Corea del Norte qué hacer, algo que Donald Trump o bien no entiende o simplemente utiliza para presionar a Pekín, explica el experto.
El «verdadero objetivo» de Pionyang
Mientras tanto, la declaración de la Cancillería china pone de relieve «que se le ha agotado la paciencia» y que considera que EE.UU. está «derogando la responsabilidad» de encontrar una manera de llegar a una solución a la crisis coreana.
Según el analista, los chinos saben que EE.UU. podría hacer mucho más, por ejemplo, ofrecer conversaciones bilaterales con Corea del Norte y sugerir un tratado de paz para «poner fin a la guerra de Corea de una vez por todas«, que es el «verdadero objetivo» de Pionyang.
La defensa y la seguridad de Pionyang «no están a la venta»
La posición de EE.UU. está «completamente equivocada», asegura Becker, detallando que China tiene mucho comercio con Corea del Norte, y además, entiende las preocupaciones del Gobierno de Kim Jong-un, que cree que las armas nucleares son «absolutamente esenciales para su propia seguridad» en un contexto en el que EE.UU. realiza ejercicios de guerra simulando la destrucción de Corea del Norte dos veces al año.
China sabe muy bien que no tiene sentido intentar «hacer morir de hambre a Corea del Norte o ahogar todo el comercio», porque la defensa y la seguridad de Pionyang «no es una moneda de cambio, no están a la venta».
¿Qué debe hacer EE.UU.?
En lugar de presionar a China, Washington debería adoptar una nueva política hacia Corea del Norte que permita que Pionyang «se sienta segura» y «sepa que no será invadida». Por ejemplo, podría dejar de simular la destrucción del hermético país con ejercicios de guerra, y pedir a cambio que limite su programa nuclear, sugiere el analista, que advierte, sin embargo, que aun así el Gobierno de Kim no se deshará de sus armas nucleares por completo.