Bloqueada en Argentina la democratización de la información
Macri desguaza por decreto la “Ley de Medios”, considerada la mejor del mundo; no fija límites a la concentración de medios y anula los organismos participativos.
José Manuel Martín Meden secretario de Medios Públicos del Sindicato de Periodistas de Madrid (SPM-FeSP).
El poderoso Grupo Clarín es el que más se ha beneficiado de la política del gobierno del presidente argentino Mauricio Macri, que ha desmantelado la ejemplar Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (2009) y favorece la concentración en la propiedad de los medios.
Según la Agencia Latinoamericana de Información, fundación internacional sin fines de lucro que defiende la democratización de la información en América Latina, “Macri desguazó por decreto la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, considerada la mejor del mundo, eliminando los límites a la concentración y anulando los organismos participativos” y “permitió a Clarín dominar los negocios de televisión, telefonía, móviles e Internet”.
La ley establecía el reparto equitativo de licencias entre el servicio público, los negocios audiovisuales y las iniciativas sociales, pero los cambios impuestos por Macri eliminan los controles sobre la concentración de la propiedad de los medios en las grandes corporaciones, margina a las iniciativas sociales y provoca “un vaciamiento sistemático de contenidos, puestos de trabajo y señales en el servicio público”.
En el ámbito laboral y profesional, la Agencia Latinoamericana de Información (ALAI) denuncia que se han perdido en Argentina 3.000 puestos de trabajo, se han precarizado los empleos y se persigue judicialmente a los periodistas que se movilizan contra la política de Macri.
ALAI reclama que “la información deje de ser considerada como un negocio y sea reconocida como un bien social indispensable para el debate público en democracia”. En cambio, explica, “la asignación arbitraria y discrecional de pauta publicitaria y frecuencias radioeléctricas e infraestructura para negocios de telecomunicaciones y plataformas digitales no nacionales, están afectando la sostenibilidad de los medios argentinos y el futuro de una comunicación democrática con pluralidad de voces”.
Relacionado
