66,1 % de las mujeres sufren de violencia de género en México

El Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía de México (Inegi) detalló este viernes que el 66,1 por ciento de las mexicanas de 15 años en adelante han sufrido algún incidente de violencia de género a lo largo de su vida, a través de una encuesta realizada por la organización.

La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, señaló que unas 30,7 millones de mujeres «han padecido al menos un incidente de violencia emocional, económica, física, sexual o discriminación en los espacios escolar, laboral, comunitario, familiar o en su relación de pareja».

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De igual manera, el Inegi enfatizó que el 43,9 por ciento de las mujeres han sufrido violencia por parte de su actual cónyuge o novio, por lo que la pareja es el ámbito en el que ocurren más frecuentemente las situaciones de violencia.

Por su parte, la secretaria ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres, Marcela Eternod, sostiene que aunque este tipo concreto de violencia haya bajado respecto a la encuesta de 2011 que se registró con un 47 por ciento, los resultados del sondeo son «aterradores».

Asimismo, destacó que en México se da una «pandemia de violencia contra las mujeres», y que por ello han de seguir los esfuerzos de sensibilización y concienciación hasta que se alcance un «patrón cultural» que elimine los «privilegios» de quienes hayan nacido varones.

De acuerdo con la encuesta, el otro ámbito donde se ve reflejada la violencia es en el comunitario, dado que en espacios como la calle, el parque y el transporte, el 38,7 por ciento de las mujeres han sido víctimas de actos de violencia por parte de desconocidos.

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Este tipo de agresiones son principalmente de tipo sexual con un 66,8 por ciento, como pueden ser piropos ofensivos, intimidación, violación o intento de violación.

En el ámbito laboral, el 26,6 por ciento de las mujeres han afrontado acoso sexual o de discriminación por razones de género o por embarazo.

El Instituto explicó que «la discriminación, las agresiones sexuales y las de tipo emocional, como las humillaciones, degradación e intimidación, son los tipos de violencia más frecuentes en el trabajo».

El 10,3 por ciento de las mujeres que trabajan en los últimos 12 meses han percibido «menos oportunidades que un hombre para ascender», y el 9,2 por ciento reciben menos salario que un hombre con el mismo puesto.

En el ámbito escolar, la mayoría de las agresiones se producen en las instalaciones educativas con un 74,3 por ciento, y el resto en las inmediaciones.

Según la institución, cada cinco mujeres que estudia bachillerato o preparatoria ha sido víctimas de violencia, particularmente del tipo sexual, en el último año.

Además de la capital, otros diez estados superan la media nacional en cuanto a violencia contra las mujeres: Estado de México, Jalisco, Aguascalientes, Querétaro, Chihuahua, Yucatán, Durango, Coahuila y Baja California.

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La secretaria de Inmujeres dijo que en las grandes urbes, como la Ciudad de México, Guadalajara o Monterrey, hay «mucho más conocimiento de los derechos de las mujeres a una vida libre de violencia, a la igualdad».

Además, comentó que estima «muy positivo» que cada vez más mujeres puedan identificar los diferentes tipos de agresiones.

«Se ha ido desnaturalizando la violencia contra mujeres y niñas», comentó Eternod, quien también precisó que la encuesta este año ha perfeccionado su metodología para facilitar esta identificación.

En relación con el tipo de violencia de género, la más frecuente es la emocional, que sufren 49 de cada 100 mujeres; luego la sexual con 41,3 por ciento; la física 34 por ciento; y la económica-patrimonial 29 por ciento.

La encuesta también revela que el motivo mayoritario que esgrimen las mujeres para no denunciar la violencia física o sexual es el mismo en los ámbitos familiar, comunitario, laboral y escolar: «Se trató de algo sin importancia que no le afectó».

«Tenemos que hacerles ver que estas situaciones sí son importantes, tienen consecuencias, dañan emocionalmente, También tenemos que cambiar la manera de ver la violencia que tienen las propias mujeres», sostuvo.