La medida también fue dictada contra Faustino Yucra, un dirigente del trópico de Cochabamba, presunto coautor de los delitos con Morales.

La medida judicial había sido anticipada por la autoproclamada presidenta de Bolivia tras el golpe de Estado, Jeanine Áñez. «Seguramente en los próximos días se va emitir esa orden de aprehensión porque nosotros ya hemos hecho las denuncias pertinentes», dijo.

Además, añadió que Morales «sabe que tiene cuentas pendientes con la justicia y a ello se tendrá que atener».

La presunta prueba

La denuncia contra Morales fue presentada a finales de noviembre por el ministro del Interior del Gobierno de facto de Bolivia, Arturo Murillo.

La acusación se hizo luego de darse a conocer un video en el que se aprecia una presunta conversación entre Yucra y Morales, donde el depuesto mandatario le indica cómo organizar los bloqueos en el país para protestar contra el Gobierno de facto.

En la conversación, la persona identificada como Morales dice: «Dividan el sindicato en cuatro o cinco grupos. Yo aguanté un mes de bloqueo (así). Te pongo un ejemplo, si mi sindicato tiene 40 afiliados, cada grupo de diez en diez, cuatro grupos, eso es para mucho tiempo».

Luego, añade: «Hermano, que no entre comida a las ciudades, vamos a bloquear».

Desde entonces, la Fiscalía abrió una investigación contra el mandatario depuesto, según anunció el fiscal general de Bolivia, Juan Lanchipa.

‘No me asusta’: Morales desafía orden de arresto en su contra

El depuesto presidente Evo Morales asegura que “no le asusta” la orden de detención en su contra, emitida por el gobierno de facto de Bolivia.

“A 14 años de nuestra revolución, el ‘mejor regalo’ que recibo del gobierno de facto es una orden de aprehensión, injusta, ilegal e inconstitucional. No me asusta, mientras tenga vida seguiré con más fuerza en la lucha política e ideológica por una Bolivia libre y soberana”, ha afirmado este miércoles Morales través de Twitter.

La fiscalía ha emitido una orden de detención contra Morales por presuntos cargos de “sedición y terrorismo”, cumpliéndose así la medida, anunciada con antelación, por la presidenta del gobierno de facto boliviano, Jeanine Áñez. 

Arturo Murillo, ministro de gobierno de Áñez, ha publicado a través de Twitter una fotografía de la orden del ente acusador y así le notifica a Morales que es requerido por las autoridades.

Sin embargo, la posibilidad de que Morales sea extraditado es remota, ya que el líder indígena ha recibido este miércoles la confirmación de su estatus de “refugiado” en Argentina y no existe un tratado de extradición entre ambos países.

El jueves, el canciller argentino, Felipe Solá, aseguró que desde el momento en que alguien solicita ser refugiado se imposibilita “cualquier posibilidad de extradición”.