Amnistía Internacional denuncia tortura policial en Hong Kong

Amnistía Internacional (AL) acusa a la Policía de Hong Kong de tortura y otros abusos en su manejo de las protestas antigubernamentales que ya duran más de tres meses.

En un informe presentado el viernes, Amnistía Internacional exigió que se abran pesquisas para aclarar las denuncias de los activistas contras las fuerzas de seguridad hongkonesas.

“La policía usó fuerza innecesaria y excesiva para hacer arrestos, golpeó a un manifestante por negarse a responder una pregunta y luego lo inmovilizó en el suelo, arrojó láser a los ojos de las personas que habían sido detenidas y amenazó con electrocutar a un hombre, después de que este se negó a desbloquear su teléfono”, explica el informe.

Durante los tres meses de protestas, la represión policial se ha incrementado, a la vez que las marchas se volvían más violentas. Los manifestantes, siempre vestidos de negro, ataviados con palos y máscaras de gas, colapsaron durante días el aeropuerto, cortaron calles y destruyeron mobiliario público.

La Policía hongkonesa ha rechazado las acusaciones de Amnistía Internacional y, en un comunicado en respuesta, insiste en que mantiene “estrictas directrices para el uso de la fuerza, y la fuerza que emplee será la mínima necesaria para cumplir sus propósitos legales. Antes de hacer uso de ella, y cuando las circunstancias lo permitan, los agentes de Policía avisarán de su intención de recurrir a ella, y las personas implicadas recibirán todas las oportunidades posibles para obedecer las órdenes de la Policía”.

Hong Kong es testigo de masivas movilizaciones desde junio en contra de un proyecto de ley que permitiría las extradiciones a la China continental. El Gobierno local hongkonés suspendió el 15 de junio la polémica ley, pero las protestas continuaron con episodios violentos, porque no se han revocado por completo las enmiendas correspondientes.

China achaca los disturbios en Hong Kong a fuerzas extranjeras, como EE.UU. y el Reino Unido, y ahora Alemania.