Lo que se sabe del asesinato de un guerrillero y una guerrillera de las FARC-EP
El jefe de las FARC-EP, Carlos Antonio Lozada, manifestó que la versión dada por el Ejército carece de validez.
La muerte de dos insurgentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) a manos del Ejército Nacional el pasado martes ha resaltado la fragilidad del cese al fuego anunciado en agosto de 2016 y la necesidad de implementar el nuevo acuerdo de paz.
¿Qué ocurrió?
Miembros del grupo insurgente se hallaban a 68 kilómetros del área establecida por el Gobierno para la preconcentración de miembros de las FARC-EP, según declaraciones del Ejército.
El Ejército Nacional disparó contra ellos porque supuestamente cometían delitos, versión que ha sido desmentida tanto por la FARC-EP como por la Corporación Solidaridad Jurídica.
Miembros del Grupo Operativo de Investigación Criminal de la Policía ingresaron al sitio, levantaron los cadáveres y recibieron a otro insurgente que se acogió al Programa de Atención Humanitaria al Desmovilizado.
La Corporación Solidaridad Jurídica indicó en un comunicado que miembros del Ejército Nacional “al advertir la presencia de guerrilleros en inmediaciones de Santa Rosa, y sin mediar requerimiento alguno, procedieron a arremeter contra ellos en un ataque leve y sorpresivo, cuyo resultado fue el asesinato de dos miembros de las FARC, a punto tal que una guerrillera que había quedado herida fue ultimada en forma despiadada al tratar de auxiliar a uno de sus compañeros”.
Las reacciones
Para la Corporación Solidaridad Jurídica el ataque constituyó “una flagrante violación al cese del fuego bilateral” porque este grupo de guerrilleros se movilizaba a la zona de preconcentración aprobada por el Gobierno y, además, cumplieron el protocolo establecido.
El jefe guerrillero de las FARC-EP, Carlos Antonio Lozada, destacó en su cuenta de Twitter que “urge pronunciamiento oficial de mecanismo de monitoreo y verificación sobre muerte de dos guerrilleros en sur de Bolívar”.
Lozada manifestó que la versión dada por el Ejército carece de validez y que las estrategias de monitoreo y verificación deben servir para esclarecer las circunstancias en la que ocurrieron los hechos.
Por su parte, el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, insistió en la necesidad de implementar prontamente el nuevo acuerdo firmado pasado domingo en La Habana (Cuba), porque este tipo de incidentes pone en riesgo el cese del fuego bilateral.
El Mecanismo tripartito de Monitoreo y Verificación (MM&V) anunció este jueves que investigan la muerte de los miembros de las FARC-EP y aseguró que cuando se conozca lo que realmente sucedió dará las recomendaciones necesarias para que situaciones como estas no se repitan.