La obispa de Washington pide a Trump «misericordia» con las personas migrantes y LGBTIQ+: «Temen por sus vidas»
- Trump describe a Budde como «miembro de la izquierda radical» y como una persona que le «odia».
Mariann Edgar Budde, obispa de la Catedral Nacional de Washington, ha instalado este martes al nuevo inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, a «tener misericordia con la gente del país que tiene miedo«, en particular, las personas migrantes y los miembros de la comunidad LGBTIQ+.
«Permítame hacer una última súplica, señor presidente: millones han depositado su confianza en usted y, como le dijo a la nación ayer, usted ha sentido la mano providencial de un Dios amoroso. En nombre de nuestro señor, le pido que tenga misericordia con la gente de nuestro país que tiene miedo», ha declarado durante una ceremonia de clausura la investidura de Trump como 47º presidente de Estados Unidos.
🇺🇸 | "Hay niños gays, lesbianas y transgénero en familias demócratas, republicanas e independientes que temen por sus vidas".
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) January 21, 2025
Bishop Mariann Edgar Budde, obispo de Washington, le pidió misericordia a Trump por los inmigrantes y familias de personas LGBT.
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Dirigiéndose directamente al magnate, que estaba sentado en primera fila junto al vicepresidente, JD Vance, y las primera y segunda damas, Budde ha defendido que «hay niños gays, lesbianas y transgénero en familias demócratas, republicanas e independientes, algunos de los cuales temen». por sus vidas».
Asimismo, la obispa se ha referido a «las personas que recogen nuestros productos y limpian nuestras oficinas, que trabajan en granjas avícolas y lavan los platos en sus restaurantes y trabajan en los turnos de noche en los hospitales».
«Puede que no sean ciudadanos o no tengan la documentación adecuada, pero la gran mayoría de los migrantes no son criminales. Pagan impuestos y son buenos vecinos. Son miembros fieles de nuestras iglesias, mezquitas y sinagogas», añadió.
Estas palabras se producen después de que el republicano prestara juramento al cargo y firmara cerca de un centenar de órdenes ejecutivas, algunas de las cuales afectan directamente a estos dos grupos de población.
Este mismo martes, el presidente ha autorizado a las fuerzas del orden federal arrestar a migrantes irregulares y llevar a cabo operaciones policiales en lugares considerados sensibles, como iglesias, hospitales o colegios.
Asimismo, sus decretos incluyen eliminar la concesión de la ciudadanía estadounidense por derecho de nacimiento, suspender todas las llegadas de solicitantes de asilo y la declaración del estado de emergencia en la frontera sur con México.
Respecto a las personas LGBTQ, Trump ha firmado un decreto proclamando que su Gobierno solo reconoce dos sexos, masculino y femenino, y otro en el que pone fin a los programas «radicales y derrochadores» de diversidad, equidad e inclusión dentro de las agencias federales. , y ha eliminado los recursos de las páginas web gubernamentales.
CRÍTICAS DE TRUMP A BUDDE
En respuesta, Trump ha recurrido a su cuenta en la red social Truth Social para cargar contra Budde, a quien ha descrito como «un miembro de la izquierda radical» y como una persona que le «odia». «Ha metido a su iglesia en el mundo de la política de una forma muy descortés», ha manifestado.
«Su tono ha sido desagradable y no convincente ni inteligente. No ha mencionado el gran número de migrantes ilegales que han venido a nuestro país y han asesinado a gente. Muchos llegaron desde cárceles e instituciones psiquiátricas», ha argumentado, antes de apuntar nuevamente a la existencia de «una enorme ola criminal» en el país norteamericano.
«Al margen de sus afirmaciones inapropiadas, el servicio fue muy aburrido y poco inspirador. No es muy buena en su trabajo. Ella y su iglesia deben una disculpa al público», ha zanjado, poco después de afirmar a su regreso a la Casa Blanca. que el sermón de Budde «no fue muy emocionante». «No pienso que haya sido un buen servicio, no. Podrían haberlo hecho mucho mejor», reseñó.
La obispa, en declaraciones a CNN, ha señalado que, si bien la reacción del presidente a sus palabras fue respetuosa, «algunos de los otros comentarios» que ha recibido «no han sido tan amables». «Y una de las cosas que intentaba transmitir es que podemos mantener estas conversaciones de forma respetuosa», añadió.
Al explicar las razones que motivaron el sermón, Budde ha asegurado que lo hizo para hablar en nombre de «las personas reales que conozco». «No son personas abstractas para mí. Quería presentar una visión de cómo puede ser la unidad en este país, que trascienda las diferencias y los puntos de vista y reconozca nuestra humanidad común», ha explicado.
«Hablé al presidente porque sentí que se encuentra en un momento en el que se siente capacitado para hacer lo que se siente llamado a hacer. Y quería decirle que hay lugar para la misericordia. Hay espacio para una compasión más amplia», ha añadido.
Budde es el líder espiritual de la Diócesis Episcopal de Washington y, según recoge la página web del obispado, es una «defensora (…) de la justicia, incluida la equidad racial, la prevención de la violencia armada, la reforma de la migración, la plena inclusión de las personas LGBIQ+ y el cuidado de la creación».