ACNUR y las agencias humanitarias refuerzan la respuesta sanitaria en los campamentos de refugiados en Kenia
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados ha desplegado medidas extraordinarias tras el anuncio del gobierno keniata de dos casos de Covid-19 detectados en el país.
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, las agencias humanitarias y el Gobierno de Kenia están reforzando su respuesta frente al coronavirus, después de que el Gobierno confirmara que dos personas dieron positivo por COVID-19 en los campamentos de refugiados de Dadaab.
En línea con las directrices del Gobierno keniano, las dos personas fueron puestas en cuarentena y trasladadas a centros de aislamiento tras recibir los resultados positivos. El equipo de Vigilancia y Respuesta de Enfermedades del Ministerio de Salud keniano ha comenzado la localización de contactos.
Las condiciones de hacinamiento en los campamentos de refugiados de Dadaab, donde los servicios de salud ya están sometidos a una gran presión, suscitan serias preocupaciones sobre la vulnerabilidad de más de 217.000 refugiados y 320.000 personas de las comunidades de acogida que viven en el campamento y sus alrededores.
ACNUR, sus socios y otras agencias de la ONU han estado apoyando el plan de respuesta nacional dirigido por el Gobierno para mitigar los riesgos y prevenir la propagación del virus en los campamentos de refugiados.
En Dadaab, se han mejorado las instalaciones sanitarias, con la construcción de centros de aislamiento y cuarentena que proporcionan camas para 955 personas. Asimismo, se han instalado 125 puntos de lavado de manos en los espacios de distribución de alimentos, escuelas y mercados.
Los centros de salud han recibido 68 equipos de protección individual (EPIs) para el personal de primera línea, 450 pares de guantes, 45.000 máscaras quirúrgicas y cuatro concentradores de oxígeno. Algunos grupos de refugiados también han producido más de 150.000 mascarillas de tela que en los próximos días estarán listas para su distribución. Todos los trabajadores sanitarios han recibido formación sobre prevención y respuesta ante la COVID-19. Actualmente hay 18 médicos, 150 enfermeros, 52 clínicos, 11 técnicos de laboratorio y 336 voluntarios de salud comunitaria que trabajan en los campamentos de refugiados de Dadaab.
Las campañas de sensibilización sobre higiene para la prevención y la lucha contra la pandemia de la COVID-19 han llegado a más de 200.000 refugiados, especialmente a través de la radio local, carteles, folletos, mensajes de WhatsApp, redes sociales y sitios web dedicados a este tema en somalí, oromo, dinka, swahili, nuer, francés e inglés.
ACNUR, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y sus socios han proporcionado raciones dobles de alimentos y productos de higiene como jabón y bidones con el objetivo de reducir al mínimo las aglomeraciones y las colas de espera.
Los representantes de las comunidades de refugiados y los trabajadores de proximidad han recibido formación y comparten regularmente mensajes clave con la población de refugiados en el campamento. ACNUR y sus socios también han mejorado las estructuras de apoyo psicosocial y han reforzado las líneas de asistencia telefónica ya existentes para así garantizar que los refugiados y los solicitantes de asilo tengan acceso a información y orientación sobre la ayuda disponible.