Rusia establece el régimen libre de visado con toda Sudamérica

La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, informó que Rusia y Surinam concretaron un acuerdo bilateral que permite el tránsito sin visado de los ciudadanos de ambos países en los territorios rusos y surinameses, de modo que ya Rusia goza del régimen libre de visado con todos los países de Sudamérica.

“Los Gobiernos de Rusia y Surinam concretaron un acuerdo sobre el viaje libre de visado para los ciudadanos de ambos países (…) Desde ahora la totalidad de Sudamérica, con sus 12 países, son zonas de libre visado para los rusos”, dijo la portavoz.

Del mismo modo, Zajárova afirmó que el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso se está esforzando para establecer con más países el régimen libre de visado y de este modo además facilitar el tránsito de los ciudadanos de otros países en el territorio ruso.

Según la diplomática rusa, el establecimiento del régimen libre de visado en Sudamérica crea nuevas oportunidades para el desarrollo de los lazos comerciales, económicos, humanitarios y culturales, además de aumentar el turismo desde y a esta región.

“Se están generando condiciones favorables para expandir y aumentar las relaciones con los países de esta región”, dijo y expresó su esperanza de que haya un fortalecimiento de los lazos de Moscú con las naciones sudamericanas.

Moscú, junto a China, está aumentando sus relaciones en distintos ámbitos, entre ellos económicos y militares, con varios países de la región, en medio de las políticas agresivas de EE.UU. contra ciertos países latinoamericanos, entre ellos Cuba y Venezuela.

Estados Unidos tacha de “amenaza a la soberanía” el acercamiento, a su juicio alarmante, de cada día más de Rusia y China a esta región y advierte que se esforzará para impedirlo.

No obstante, ciertos países latinoamericanos, entre ellos Venezuela, Cuba y Bolivia, han criticado, por su parte, las políticas imperialistas de Washington en la región, en concreto la presencia de bases militares estadounidenses.

A su vez, Rusia denuncia que los países latinoamericanos son “un patio trasero” para EE.UU. y asegura que el rumbo político de Moscú en América Latina “no está dirigido contra nadie”, “ni compite” con Washington ni con otro país de la zona.

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