Los venezolanos se asfixian entre la crisis política y las sanciones de EEUU
Las duras 'sanciones' establecidas por los Estados Unidos a Venezuela afectan drásticamente a la población en mitad de una situación agravada por la pandemia. Washington ha desoído las peticiones de organismos internacionales y del mismo Papa Francisco de levantar las medidas cohercitivas durante la crisis sanitaria mundial.
Una crisis que parece no tener fin, sanciones económicas de Estados Unidos y, por si eso fuera poco, una pandemia global que paralizó el planeta, son algunas de las situaciones con las que tienen que lidiar a diario los venezolanos. Para algunos, las medidas de EEUU afectan principalmente a los ciudadanos, y para otros son meras excusas del Gobierno de Nicolás Maduro para esconder la ineficiencia en brindar una mejor calidad de vida a los habitantes de ese país sudamericano.
Liliana García, de 52 años, cree que es inhumano por lo que está a travesando el país, pues al fin de cuentas dice que el Gobierno sigue haciendo política y los ciudadanos son los que corren con las consecuencias. «Estas sanciones a los únicos que afectan es al pueblo; el Gobierno seguirá ahí haciendo política sin que nada les afecte, ya que tienen el apoyo de potencias y (de la) comunidad internacional, siguen poniendo obstáculos pensando que afectarán al Gobierno y los únicos que han desmejorado su calidad de vida es el pueblo, oficialista y de oposición», dijo la mujer a la agencia Sputnik.
Manuel Ruiz, comunicador social, coincidió en que las sanciones tienen un efecto directo en la población, debido a que le dificultan el acceso a bienes y servicios básicos. «El Gobierno se ve afectado al no poder atender las necesidades básicas de la población porque las sanciones son de embargo, bloqueo y aislamiento económico», señaló. Pero no todos opinan igual.
Deficiencia e impotencia
El diputado del partido opositor Acción Democrática, José Trujillo, fue enfático al acusar al Gobierno de ser el responsable de las sanciones contra Venezuela, pues a su juicio éstas no afectan la compra de productos esenciales. «Las sanciones no son para el pueblo venezolano, son para los funcionarios. (…) las medicinas, la comida y todo lo que tiene que ver con insumos médicos no tiene ninguna sanción, las sanciones son contra ellos y con el dinero que les han trancado a todo el mundo», sostuvo. Sin embargo, el Gobierno insiste en que en medio de la pandemia las operaciones financieras han sido devueltas por bancos internacionales, como consecuencia de las medidas coercitivas impuestas por EEUU, lo que dificulta la compra de alimentos, insumos básicos y medicamentos.
Indira Nieto vive en el sector Los Flores de Catia, una zona de la capital en la que residen muchas familias de bajos recursos económicos. Ella sufre lo que muchos otros: la deficiencia en los servicios públicos y la impotencia de no verle solución a esos problemas. «El Gobierno ha demostrado que no tiene la más mínima intención de resolver la crisis (…) Estas sanciones ponen entre la espada y la pared al régimen, esto debe tener un desenlace porque el juego está trancado, sin agua, electricidad, medicamentos, alimentos», acota la mujer.
Por el contrario, Alberto Méndez, empleado del sector público, opinó que los ciudadanos se dieron cuenta que las deficiencias en el país sí forman parte de las consecuencias de las medidas coercitivas. «En medio del covid-19 cualquier sanción afecta, pero ayudó al Gobierno, porque el pueblo aceptó y entendió que las sanciones son verdaderas (…) El efecto en el Gobierno y en el país ha sido que nos obliga a poner en práctica el viejo eslogan de pasar de la Venezuela rentista a la productiva», apuntó.
Sanciones vs. gasolina
Desde el pasado mes de marzo la escasez de gasolina que desde hace dos años afronta el interior del país llegó a la capital. Tanto, que para llenar el tanque del auto los ciudadanos deben hacer hasta 72 horas de cola en las estaciones de servicio. En ese sentido, Venezuela acusa a EEUU de impulsar un bloqueo naval, que impide el suministro de aditivos químicos, insumos y repuestos para la producción de combustible en todo el país.
Carolina Miranda, trabajadora del sector inmobiliario, rechazó que el Gobierno diga que la escasez de la gasolina es producto de las sanciones. «La gasolina ya es un tema que todos los venezolanos esperábamos. Ellos tratan de acusar a las sanciones pero este país ya estaba destruido legal y económicamente», expuso.
El diputado del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Julio Chávez, aseguró que existe una persecución por parte de EEUU que impide al Gobierno solventar el problema del combustible. «Esta imposibilidad de comprar gasolina, no poder adquirir repuestos para hacer mantenimiento al sistema eléctrico nacional, a nuestras petroquímicas, a las empresas básicas, sin lugar a dudas ha afectado grandemente la situación actual y la intención realmente de los enemigos históricos de la revolución bolivariana es que no podamos atender como corresponde esta pandemia de covid-19», indicó.
Chávez manifestó que las acciones de EEUU contra la actividad económica del país sin duda han afectado las condiciones de vida de los ciudadanos. Entre tanto, el Gobierno venezolano espera la llegada de barcos con combustibles desde Irán -acción que Estados Unidos consideró como una amenaza-, para intentar paliar, al menos en parte, la dramática situación que vive el país.