Amnistía Internacional: “Turquía deporta por la fuerza a refugiados sirios»
Un nuevo informe de Amnistía Internacional revela que Turquía pasó los meses previos a su incursión militar en el nordeste de Siria deportando a la fuerza a los refugiados, antes de intentar crear una llamada 'zona segura' en el lado sirio de la frontera.
Un nuevo informe de Amnistía Internacional, titulado ‘Enviado a una zona de guerra: las deportaciones ilegales de refugiados sirios de Turquía’, ha revelado que Turquía se pasó los meses previos a su incursión militar en el nordeste de Siria deportando por la fuerza a refugiados al país devastado por la guerra, antes de intentar crear la llamada “zona segura” en el lado sirio de la frontera.
La organización se ha reunido o hablado con refugiados que han explicado que la policía turca los golpeó y amenazó con la firma de documentos que indicaban que pedían regresar a Siria, cuando en realidad Turquía los obligaba a regresar a una zona de guerra poniendo sus vidas en grave peligro.
Anna Shea, investigadora de los derechos de los refugiados y los migrantes en Amnistía Internacional, ha dicho: “La afirmación de Turquía de que los refugiados sirios están optando por regresar directamente pese al conflicto es peligrosa y deshonesta. Más bien, nuestra investigación muestra que las personas están siendo engañadas u obligadas a regresar”.
Shea ha agregado: “Turquía merece reconocimiento por albergar a más de 3’6 millones de mujeres, hombres y niños sirios durante más de ocho años, pero no puede usar esta generosidad como una excusa para ignorar las leyes nacionales e internacionales al deportar a las personas a una zona de conflicto activa”.
Sin estadísticas oficiales, es difícil estimar el número de deportaciones forzadas. Pero según las decenas de entrevistas realizadas entre julio y octubre de 2019 para el informe, Amnistía Internacional estima que en los últimos meses la cifra probablemente sea de cientos. Las autoridades turcas afirman que un total de 315.000 personas se han ido a Siria de forma totalmente voluntaria.
Es ilegal deportar personas a Siria, ya que las expone a un riesgo real de violaciones graves de los derechos humanos.
“Es escalofriante que el acuerdo de Turquía con Rusia esta semana acepte el ‘retorno seguro y voluntario’ de los refugiados a una ‘zona segura’ aún no establecida. Los retornos hasta ahora han sido cualquier cosa menos seguros y voluntarios, y muchos otros millones de refugiados sirios están en riesgo”, ha dicho Anna Shea.