Ortega afea a EEUU y ensalza apoyo militar de Rusia a Nicaragua

Ortega dijo que la cooperación entre Moscú y Managua se ha ido afianzando desde su retorno al poder en 2007 y abarca desde alimentos básicos como el trigo y otros campos como la educación, ciencia, tecnología y defensa.

“Con la Federación Rusa, a partir del 2007, se comenzó a desarrollar una cooperación intensa […] han logrado brindarnos un aporte invaluable en el campo de la defensa de nuestro país para contar con las herramientas y defender la paz y la soberanía”, enfatizó el lunes el mandatario nicaragüense, en un acto de entrega de 250 autobuses fabricados en Rusia que contó con la presencia de una delegación rusa.

Además, señaló el apoyo ruso en la lucha contra el narcotráfico y frente a los desastres naturales. En este sentido, precisó que Moscú instaló en Managua un centro de capacitación regional para combatir al narcotráfico y al crimen organizado.

El jefe de Estado nicaragüense puso de relieve que, gracias al principio de soberanía y solidaridad que practica Rusia, su país tiene el récord de compra de autobuses rusos por lo que agradeció a su homólogo ruso, Vladímir Putin.

“Para él nuestro respeto, nuestro cariño y estamos juntos, presidente [Putin], en la lucha por la paz y en la lucha por la soberanía y la justicia de nuestros pueblos”, añadió.

El líder sandinista también afirmó que Nicaragua ha recibido 3,9 millones de vacunas rusas contra la COVID-19, causante del nuevo coronavirus.

Desde que Ortega recuperó el poder en 2007, Managua y Moscú han afianzado sus relaciones en todos los campos. El presidente Putin ha reiterado que Nicaragua es un socio “muy importante” de Rusia en América Latina.

EE.UU. usa “mentiras e infamias” para dominar Nicaragua

En otro momento de sus declaraciones, Ortega arremetió contra Estados Unidos por tratar de dominar a Nicaragua lanzando “todo tipo de calumnias, mentiras e infamias”.

Este, prosiguió, es el mismo modelo que aplica Washington respecto a Rusia, China “e incluso con sus aliados europeos”.

De hecho, EE.UU., a la cabeza de los países occidentales, impone duras presiones y una campaña de difamación al mandatario sandinista, las cuales han aumentado desde que este postulara por la reelección en los próximos comicios del 7 de noviembre.

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