El Salvador renueva el Congreso en unas elecciones con aire plebiscitario sobre el presidente Nayib Bukele
El partido del mediático y controvertido presidente Nayib Bukele, Nuevas Ideas, amenaza con arrasar en las legislativas desplazando por completo a la izquierda del FMLN y al derechista ARENA, permitiéndole reformar la Constitución del país a su antojo.
- La presidencia de Bukele ha estado jalonada de desencuentros y enfrentamientos con el legislativo, incluida una tentativa de autogolpe, ante las limitaciones impuestas por el Congreso a sus ambiciones.
Las elecciones en El Salvador para elegir a los diputados de la Asamblea Legislativa, el Parlamento Centroamericano y los gobiernos locales podrían darle, según los sondeos, una mayoría en el Congreso a Nuevas Ideas (NI), el partido del presidente Nayib Bukele, lo que le permitiría controlar la aprobación o la reforma de leyes y los préstamos crediticios de los fondos internacionales sin oposición alguna.
En torno a 5,4 millones de salvadoreños podrán ejercer su derecho al voto en los 1595 centros habilitados para la ocasión en todo el país, a partir de las 7:00, hora local.
Los salvadoreños deberán elegir los 84 diputados a la Asamblea Legislativa, autoridades de 262 alcaldías y 20 diputados al Parlamento Centroamericano, una instancia de la integración regional.
Con el objetivo de garantizar que el proceso se desarrolle con total normalidad, los responsables han dispuesto de los servicios de unos 40 000 efectivos de seguridad, entre policías y militares. Además, los observadores internacionales vigilarán la correcta marcha de la cita electoral en los centros de votación repartidos por todo El Salvador.
De acuerdo a las encuestas realizadas en vísperas de la jornada electoral, se presagia el fin del bipartidismo en el seno del Congreso salvadoreño, que ha estado dominado por la derechista Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) y el izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
Estas dos formaciones han estado presentes en el espectro político de El Salvador desde los acuerdos de paz de 1992, que pusieron fin a 12 años de guerra civil, hasta que Bukele llegó al poder en 2019 como una alternativa al bipartidismo.
Así pues, si los datos arrojados por los sondeos coinciden con el resultado electoral de una mayoría legislativa para los diputados de la NI, Bukele podría consolidar su poder e incidir en los nombramientos en la Corte Suprema de Justicia, la Contraloría y la Fiscalía, con las cuales ha tenido disputas, así como promover reformas constitucionales de su interés.
Frente a esta posible coyuntura, diversos agentes sociales de El Salvador han denunciado la violencia “exacerbada” que ha imperado durante la campaña electoral, que se ha cobrado la vida de dos militantes del FMLN. Además de alertar del uso político que está haciendo el conservador de Bukele de la Policía Nacional y el Ejército para incidir en la votación y favorecer a aliados de su Ejecutivo.
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