El ex director de la CIA John Brennan califica el asesinato de Fakhrizadeh de «acto criminal y altamente imprudente»

El exdirector de la CIA John Brennan ha instado a Teherán a esperar el «regreso de líderes estadounidenses responsables» antes de tomar represalias contra los presuntos autores del asesinato del prominente científico nuclear iraní Mohsen Fakhrizadeh, muerto este viernes tras ser tiroteado cerca de Teherán.

En medio de especulaciones sobre la supuesta participación de Israel y EE.UU. en el atentado, Brennan tuiteó que la muerte de Fakhrizadeh es «un acto criminal y altamente imprudente» que podría provocar «represalias letales y una nueva ronda de conflicto regional».

«Los líderes iraníes harían bien en esperar el regreso del liderazgo estadounidense responsable en el escenario global y resistir el impulso de responder contra los culpables percibidos», comentó, en aparente referencia a la toma de posesión de Joe Biden en enero.

¿Un «acto de terrorismo patrocinado por un Estado»?

En otro tuit, Brennan reconoció que «no sabe si un gobierno extranjero autorizó o llevó a cabo el asesinato de Fakhrizadeh», pero advirtió que, de ser así, sería un acto de «terrorismo patrocinado por un Estado» y una violación «flagrante» del derecho internacional que «alentaría a más gobiernos a llevar a cabo ataques letales contra funcionarios extranjeros».

En este sentido, el que fuera director de la Agencia Central de Inteligencia entre 2013 y 2017, bajo la presidencia de Barack Obama, enfatizó que la muerte de Fakhrizadeh es «muy diferente a los ataques contra líderes y operarios terroristas de grupos como Al Qaeda y el Estado Islámico, que no son Estados soberanos». «Como combatientes ilegítimos, según el derecho internacional, pueden ser blancos para detener ataques terroristas mortales», señaló.

«La mano criminal» de EE.UU. y de Israel 

El científico Mohsen Fakhrizadeh, considerado por muchos el padre del programa nuclear iraní, fue asesinado este viernes en la localidad de Absard, a unos 60 kilómetros de la capital, Teherán.

El jefe del Ejército de Irán, el general mayor Abdolrahim Mousavi, afirmó que «la mano criminal de EE.UU.» y de Israel se «ve claramente» detrás del asesinato. Por su parte, el ministro de Exteriores iraní, Mohamad Yavad Zarif, declaró que hay indicios serios de que Israel tuvo un papel en el crimen.

Hossein Dehghan, asesor militar del líder supremo iraní, Alí Jamenei, acusó a Tel Aviv de tratar de provocar «una guerra a gran escala» con este atentado.

Asimismo, Irán ha dirigido una carta a la ONU en la que asegura que existen «serios indicios de responsabilidad israelí» en el asesinato y advierte «contra cualquier medida aventurera de los Estados Unidos e Israel» contra el país persa.