HAMAS: Próxima guerra ‘abrirá las puertas del infierno’ a Israel

El jefe adjunto de la oficina política del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), Saleh al-Aruri, aseguró el lunes la respuesta de los grupos de Resistencia a cualquier agresión del régimen de Tel Aviv a los palestinos de Al-Quds (Jerusalén). “Cualquier agresión israelí contra los fieles palestinos en el complejo de la mezquita de Al-Aqsa aumentará las tensiones actuales”, advirtió el funcionario de HAMAS.

Hoy, destacó Al-Aruri, el régimen ocupante enfrenta una “prueba” y es momento de que los ocupantes aprendan la lección de que Al-Quds, sus lugares sagrados y la mezquita de Al-Aqsa son una “línea roja” para la nación palestina.

En alusión a la operación palestina denominada ‘Espada de Al-Quds’ de mayo de 2021 para enfrentar los ataques israelí contra la Franja de Gaza, Al-Aruri anunció esa batalla como el “preludio” de una “larga guerra” para la cual la Resistencia está completamente “preparada”.

“El próximo enfrentamiento con el régimen ocupante para defender Al-Quds será más amplio y popular, y marcará un punto de inflexión en la historia del conflicto con el régimen israelí”, enfatizó el funcionario de HAMAS en declaraciones ofrecidas a la cadena libanesa de noticias Al-Mayadeen.

En el marco del comienzo del noveno mes del calendario musulmán, Ramadán, Al-Aruri llamó a las tropas del régimen usurpador a no agredir a los palestinos durante las jornadas de rezo de este mes importante en la Mezquita de Al-Aqsa. “El régimen sionista abrirá las puertas del infierno, si impide que los fieles [musulmanes] entren en la Mezquita de Al-Aqsa durante el mes sagrado del Ramadán”, subrayó.

De igual modo, con respecto a la huelga de hambre de los presos palestinos en las cárceles israelíes, puso énfasis en que, conforme a fuentes relevantes, si llega el Ramadán y los presos siguen en huelga, la situación en los territorios ocupados se volverá bastante “tensa”.

Normalización de lazos con Israel será un “ataque al pueblo palestino”

En otra parte de sus declaraciones, Al-Aruri denunció la normalización de las relaciones entre algunos Estados árabes e Israel, y señaló que cada paso hacia la “legitimación y la cooperación con el régimen israelí” será un “ataque a todo el pueblo y nación palestinos”.

“Desafortunadamente, Israel se ha aliado con algunos regímenes árabes en sus intereses, pero rechazamos la cercanía de relaciones de los países árabes e islámicos con el régimen israelí, ya sea por parte de Turquía, Catar u otros países”, condenó.

Israel acogió el domingo una cumbre en una localidad del desierto de Néguev (sur de los territorios ocupados palestinos) que reunió al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, el canciller israelí, Yair Lapid, y los ministros de Asuntos Exteriores de Baréin, de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y de Marruecos, que normalizaron las relaciones con el régimen israelí desde los finales de 2020. El evento fue condenado por los grupos pro palestinos y los movimientos de Resistencia.

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