Frank González •  Prensa Latina •  Internacional •  29/11/2020

Una menor presión hospitalaria marca tendencia de Covid-19 en Italia

  • La disminución de nuevos casos de Covid-19 y una presión menor sobre los servicios hospitalarios confirman hoy la tendencia al aplanamiento de la curva de esa enfermedad en Italia, donde es aún elevado el número diario de fallecimientos.
Una menor presión hospitalaria marca tendencia de Covid-19 en Italia

Según las estadísticas publicadas la víspera por el Ministerio de Salud, el número de casos confirmados hasta ahora ascendió a un millón 564 mil 532, incluidos 26 mil 323 diagnosticados en las 24 horas precedentes y a 54 mil 363 los decesos, entre ellos 686 nuevos.

Asimismo, descendió de 33 mil 684 a 33 mil 299 la cifra de pacientes en áreas médicas regulares y de tres mil 782 a tres mil 762 la de quienes permanecen en terapia intensiva.

Esos datos están en línea con los de las dos últimas semanas, los cuales mostraron una reducción de la variación media cotidiana de personas contagiadas, de 28 mil 857 a 22 mil 237, con un aumento de 632 a 728 muertes.

Al mismo tiempo, en los últimos cuatro días se observó una tendencia decreciente en la cifra de pacientes en salas de recuperación y unidades de cuidados intensivos, de 34 mil 313 a 33 mil 299 y de tres mil 848 a tres mil 782, respectivamente.

Tanto las autoridades sanitarias como la comunidad científica coinciden en que la mejoría experimentada por la curva de contagios, refleja la eficacia de las restricciones adicionales aplicadas por el gobierno para tratar de frenar la rápida propagación del coronavirus SARS-CoV-2 en la primera mitad de este mes.

Las nuevas regulaciones descansan en un sistema de tres niveles –amarillo, naranja y rojo- para la aplicación progresiva de restricciones en las 20 regiones del país de acuerdo con el deterioro del contexto epidemiológico de cada una.

Al margen de los frecuentes movimientos de los territorios entre uno y otro color, las expectativas se centran en el próximo 3 de diciembre, cuando expirará el actual decreto con regulaciones para enfrentar la epidemia y el gobierno deberá emitir otro, el cual abarcará el período de celebraciones de Navidad y Fin de Año.

Según el más reciente monitoreo del Instituto Superior de Salud (ISS) y el Ministerio de Salud, del 16 y el 22 de noviembre, la velocidad de transmisión de la epidemia disminuyó, con el indicador Rt en torno a uno en muchas regiones y un descenso de la incidencia a nivel nacional en los 14 días anteriores.

A pesar de esas señales positivas, el informe apuntó que la propagación de la enfermedad es aún demasiado elevada para permitir una gestión sostenible de contención, en función de lo cual es necesario lograr niveles de transmisibilidad significativamente inferiores a uno.

Por tal motivo, sugirió evitar un ‘relajamiento prematuro de las medidas’, o descuidar el cumplimiento de las normas individuales de conducta establecidas para prevenir el contagio, entre ellas mantener ‘la drástica reducción de las interacciones físicas’, más allá del núcleo familiar.

En una conferencia de prensa la víspera, el presidente del ISS, profesor Silvio Brusaferro, señaló que en toda Europa se registran avances en la actual fase de mitigación de la epidemia respecto a semanas precedentes, de manera que ‘el color rojo comienza a atenuarse’ en el mapa regional.

Al referirse a la incidencia de la enfermedad por cada 100 mil habitantes, explicó que, metodológicamente se puede medir en dos espacios temporales, uno semanal y otro de 14 días, el cual permite apreciar tendencias más estables por ser más prolongado. Al respecto acotó que en una etapa como la actual, ‘en la cual esperamos exista una disminución progresiva de casos’, se aprecia una incidencia elevada en los siete días previos al 25 de noviembre, con 321 casos por cada 100 mil habitantes y más de 700 en 14 días.

En ese sentido, precisó que la realidad italiana es muy diversa porque hay casos como la provincia autónoma de Bolzano, donde la incidencia fue de 650 y otros como Cerdeña donde marcó apenas 65.

Por otra parte, afirmó que descienden los niveles de ocupación de camas en recuperación y terapia intensiva, aunque ambos están aún en alrededor de 40 por ciento, por encima del 30 por ciento recomendado.


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