Amigos de la Tierra reclama una solución al problema de los mercados de carbono y denuncia la ausencia de la sociedad civil y el sur global en la COP26

Tras la postergación de un año a causa de la crisis del COVID19, la Cumbre de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP26) se celebrará del 1 al 12 de noviembre en Glasgow, una cumbre que, según se prevé, no contará con la necesaria participación de la sociedad civil, principalmente, del Sur Global.

Amigos de la Tierra contará con una delegación desde España junto a la representación de grupos de la organización de Amigos de la Tierra Internacional, menos de África, quien ha decidido ausentarse de la misma como forma de protesta. La crisis del COVID19, la mercantilización de las vacunas y el acaparamiento de su suministro, y las altas restricciones impuestas suponen un obstáculo para la participación de la sociedad civil del Sur Global. La siempre alta y abundante participación del lobby corporativo contaminante junto a la obstaculizada presencia de la sociedad civil hará difícil que en esta cumbre las negociaciones sean justas y democráticas.

El último informe de síntesis de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) a raíz de las “Contribuciones determinadas a nivel nacional” (NDC por sus siglas en inglés) presentadas hasta la fecha, señala que se prevé un aumento del 16% de las emisiones mundiales en 2030 en comparación con 2010 -lo que significa un aumento de 2,7 °C a finales de siglo-. Por su parte, el IPCC señala que para limitar el aumento de la temperatura media mundial a 1,5 °C se requiere de una reducción de emisiones del 45% para 2030. Además, para que los países más pobres puedan llevar a cabo sus contribuciones necesitarán financiación, algo que tampoco se tiene previsto cumplir por parte de países del Norte en esta próxima COP26.

Para Amigos de la Tierra, la falta de compromiso tanto en la reducción real de emisiones como en la financiación necesaria a los países más empobrecidos, manifiesta una enorme irresponsabilidad por parte de los gobiernos del Norte Global, los que más responsabilidad histórica tienen sobre la Emergencia climática. La organización reclama aumentar la ambición y financiación necesaria para evitar que el calentamiento global sobrepase 1,5 °C respecto a los niveles preindustriales y señala que Glasgow puede ser la última oportunidad para fijar medidas valientes y efectivas que limiten el aumento de la temperatura global por debajo del 1,5 °C a finales de siglo.

Negociación del Artículo 6 y las falsas soluciones

Desde los inicios de las negociaciones la devastadora presencia del lobby contaminante en todas las negociaciones climáticas ha provocado la proliferación de falsas soluciones que socavan la acción climática y distraen los verdaderos mecanismos de mitigación y adaptación.

Los grandes contaminadores están presionando para que la agenda del ‘Cero Neto’ se convierta en la pieza central de las negociaciones en torno a la Cumbre sobre el Clima. Este concepto, que hace referencia a la compensación de emisiones a través de diferentes mecanismos, ha sido criticado por personas científicas y expertas que han demostrado que las promesas de ‘Cero Neto’ no mantendrán el aumento de la temperatura global por debajo de 1.5 grados. Amigos de la Tierra destaca la importancia de que en esta Cumbre los gobiernos alcancen compromisos y acciones que persigan objetivos a “Cero Real”, esto es, reducir drásticamente y de forma inmediata la quema de combustibles fósiles en los países de origen y en el extranjero siempre en función de su responsabilidad histórica.

La principal tarea que las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático tendrán durante la COP26 con respecto a los mercados de emisiones de carbono y la reducción de emisiones a “Cero Neto”, es la negociación para terminar de concretar los mecanismos de carbono contemplados en el Artículo 6 del acuerdo. La organización Amigos de la Tierra recuerda que el principio sobre el que se basan los mecanismos de compensación de emisiones como los mercados de carbono es falso. La compensación de emisiones no reduce las concentraciones totales de CO2 en la atmósfera, objetivo crucial para evitar el aumento de la temperatura global por encima de 1.5 °C. Además, estos mecanismos invisibilizan y desplazan las responsabilidades diferenciadas frente a la emergencia climática asumiendo que todos los actores tienen que realizar el mismo esfuerzo al dar por hecho que los sumideros naturales absorberán las emisiones derivadas de la quema de combustible, algo físicamente imposible.

La organización señala que, además, los mercados de carbono amenazan con graves impactos a los pueblos indígenas y las comunidades locales y hacen peligrar la financiación climática y la acción real contra la emergencia climática. Amigos de la Tierra, que estará presente en Glasgow para hacer un seguimiento cercano de las negociaciones asegura que para que la Cumbre del Clima tenga éxito los países deben anteponer a las personas y al planeta a sus intereses económicos comprometiéndose con un plan global para una la transición justa.