El MAS rechaza la expulsión de los diplomáticos españoles por el gobierno de facto en Bolivia
"Exhortamos a la Sra. Áñez que retome su postura sobre la expulsión de diplomáticos españoles y mexicanos, esto podría generar un daño a las relaciones entre ambos paises", indicó el diputado del partido Movimiento Al Socialismo, Sergio Choque.
El presidente de la Cámara de Diputados y líder de la bancada mayoritaria del Movimiento Al Socialismo (MAS), Sergio Choque, criticó este lunes la expulsión de dos diplomáticos españoles y mexicanos por parte de la presidenta autoproclamada de Bolivia, Jeanine Áñez.
«Exhortamos a la Sra. Áñez que retome su postura sobre la expulsión de diplomáticos españoles, esto podría generar un daño a las relaciones entre ambos paises, España resguarda a muchos compatriotas en su territorio, la colaboración con esta Republicana ha sido importante», indicó el diputado Choque.
Asimismo, indicó que el gobierno de facto actúa de manera hormonal e ilegal por pedir que se retiren del país diplomáticos extranjeros, «estas acciones provocan rupturas diplomáticas con países que jugaban un papel importante en el apoyo y desarrollo de nuestro país», agregó.
El gobierno de facto en Bolivia declaró personas no gratas a los diplomáticos españoles Cristina Borreguero y Álvaro Fernández, y a la embajadora mexicana en La Paz, María Teresa Mercado, así como a un grupo de policías españoles; la presidenta de facto le dio 72 horas a los funcionarios extranjeros para abandonar el país andino.
Por su parte, el gobierno en funciones de Pedro Sánchez en reciprocidad con el gobierno de facto boliviano, decidió la expulsión de tres altos cargos de la Embajada de Bolivia en Madrid. Se trata del encargado de negocios, Luis Quispe Condori; el agregado militar, Marcelo Vargas Barral y del policial, Orso Fernando Oblitas Siles.
«Tajantemente cualquier insinuación sobre una supuesta voluntad de injerencia en los asuntos políticos internos de Bolivia» y agregaron que «cualquier afirmación en este sentido constituye una calumnia dirigida a dañar las relaciones bilaterales con falsas teorías conspiratorias», indicó Sánchez.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de México, informó que espera con ytranquilidad antes de tomar una decisión, «con el fin de proteger a los más de 10.000 mexicanos que viven en Bolivia vamos a ser cautelosos”, agregan.