Correos dedica un sello a la periodista, escritora de la Generación del 27 y militante del PCE Luisa Carnés

Correos ha presentado un sello dedicado a la novelista, periodista española y militante comunista Luisa Carnés, una de las escritoras más relevantes de la Generación del 27 y una de las mujeres más influyentes de los años 30 en la cultura española. Sin embargo, su éxito no sería reconocido hasta mucho tiempo después. Hace poco más de tres décadas que se comenzó a valorar su importancia dentro del mundo de las letras en nuestro país y es por eso que muchos la conocen como una de las escritoras olvidadas de su generación.

Luisa Carnés nació el 3 de enero de 1905 en el seno de una familia obrera en el madrileño barrio de Las Letras. A los once años entró a trabajar en un taller de sombrerería y en 1928 vio publicada su primera obra, Peregrinos de calvario, una colección de narraciones breves. De lo vivido en su trabajo posterior, como camarera en un salón de té, saldría Tea Rooms. Mujeres obreras (1934), recibida calurosamente por la crítica, que destacó de ella su carácter innovador y su fuerza narrativa.

De formación autodidacta, Luisa Carnés también fue conocida por los pseudónimos de “Clarita Montes” y “Natalia Valle”. Obras atravesadas por una importante carga política con una marcada posición de defensa de la mujer y de la clase trabajadora.

La victoria de Franco en la Guerra Civil la condenó al exilió en México. Allí, acogida por el presidente Lázaro Cárdenas junta a decenas de intelectuales y artistas españoles, viviría el resto de su vida, continuando con su obra, ya marcada por un profundo componente autobiográfico, en obras como De Barcelona a la Bretaña francesa, sobre el exilio, o Episodios de heroísmo y martirio de la evacuación española. Involucrándose crecientemente en la actividad política mexicana, donde ingresó en las filas del Partido Comunista de México, Carnés colaboró con numerosas cabeceras como El Nacional, La Prensa, Noticias Gráficas o Novedades.

El 12 de marzo de 1964, su incansable actividad literaria, periodística y política concluyeron abruptamente en un un accidente de tráfico.

Juan Ramón Puyol, su nieto, lleva años realizando junto a su familia una profunda labor de difusión de las obras de la escritora para que no caigan en el olvido.