Alta traición y deserción, la «heroica gesta» militar conmemorada por la Escuela Naval de La Graña
- La Escuela de Especialidades de la Estación Naval de La Graña, un centro de formación militar de la Armada Española situado en Ferrol, recuerda en su primera orden del año el sabotaje y la alta traición de José María Lara y Dorda, teniente al mando del sumergible C-5 que lo hundió con toda su tripulación.
El Foro por la Memoria ha denunciado el contenido del primer boletín del año emitido por la Escuela de Espacialidades de la Estación Naval de la Graña por su ensalzamiento de uno de los hechos más detestables en la Armada Española durante la Guerra Civil. En su Orden número 001, la Escuela conmemora en su apartado de efemérides el hundimiento del submarino C-5 por su propio teniente, José María Lara y Dorda, con todos sus tripulantes.
En el boletín se recogen los hechos sin escatimar en terminología y lenguaje del bando sublevado y de la narrativa franquista del conflicto civil. Califica a José Lara y Dorda como «heroico», habla de la Armada Republicana como «los rojos» y menciona que el submarino desapareción «con toda su dotación», sin hacer mención a que costó la vida de decenas de tripulantes. El texto añade que «Hubo otros casos en que los Oficiales aparentaron servir a los rojos, con gran riesgo de sus vidas, evitando con habilidad y engaño efectuar ataques a los buques nacionales», identificándose implícita y explícitamente con los oficiales quintacolumnistas que cometieron alta traición una vez iniciado el conflicto.
El escrito reproduce, en realidad, la versión franquista de los acontecimiento en unos hechos que han estado rodeados de controversia histórica. A pesar del reconocimiento de las autoridades de la dictadura tras la finalización de la guerra, el destino del sumergible C-5 ha sido objeto de debates, no existiendo una posición clara sobre si se trató realmente de un sabotaje perpetrado por Lara o un catastrófico fallo mecánico. Ramón Cayuela Robles, un marinero especialista que había sido cambiado de destino antes de la última salida del C-5, argumentó ante las autoridades republicanas que, en su opinión, el hundimiento se había debido a un accidente, al dudar de las posibilidades del comandante de perpetrar los hechos sin la colaboración del resto de la tripulación. Así mismo, sostenía que, de haber querido cometer una acción suicida, Lara y Dorda habría podido hundir la nave durante el mes de septiembre cuando fue atacado por el destructor Velasco.
Frente a los argumentos de Cayuela, se encuentran las constantes llamadas desde el bando sublevado a cometer deserción o actos de alta traición hundiendo las propias embarcaciones a costa de la vida de los oficiales si era preciso. Así mismo, según numerosas fuentes, el posicionamiento de Lara y Dorda a favor de los militares sublevados estaba demostrada, estando vigilado por un comité político. Hasta en dos ocasiones sus actuaciones habrían impedido a la flota republicana enfrentarse con éxito a navíos levantados contra el estado republicano. En agosto de 1936, el submarino falló flagrantemente en sus disparon contra el Acorazado España, retirándose sin ningún motivo aparente. Posteriormente, en septiembre, durante un enfrentamiento con el Cruzero Almirante Cervera, llegó a ser relevado del mando por el jefe del comité ante su negativa a abrir fuego.
El Foro por la Memoria ha denunciado el contenido de la orden y ha señalado con sorna que dado que los ejércitos «son un ejemplo y un dechado de virtudes democráticas, esto solo puede ser una excepción», instando al Ministerio de Defensa a tomar medidas contundentes.
La Orden Número 001 es tan solo el último guiño en las Fuerzas Armadas al bando sublevado y a la dictadura franquista, una lacra que, lejos de desaparecer, parece ir en aumento. Un posicionamiento que causa si cabe más inquietud ante las asonadas de ex militares ultramontanos que han manifestado públicamente su deseo de que se produzca un golpe de estado militar.
Su carácter evocativo a un crimen de guerra y un acto de alta traición en una escuela destinada a formar a los futuros oficiales de la Armada, vuelve a poner el objetivo en el tipo de formación y la orientación política de la misma presente en las Fuerzas Armadas.