Redacción •  Negocios y Ocio •  03/04/2019

Embutidos: tradición culinaria

Los embutidos existen desde tiempos inmemoriales, casi al mismo tiempo en que la sal era utilizada para preservar los alimentos. Su evolución ha sido constante, y han logrado adecuarse a los requerimientos de la época y a su vez se han ido adaptando a los cambios de hoy en día.

Los embutidos resaltan en diferentes gastronomías a nivel mundial, destacando en la mexicana, española y alemana. A pesar de que comúnmente son apetecibles al bajar las temperaturas y resistir al frío del invierno, sobre todo por la grasa que éstos aportan y por su delicioso sabor, también lo son en otras estaciones del año.

Embutidos: tradición culinaria

Importancia de los embutidos

Los embutidos están elaborados a partir de carnes autorizadas, siendo la de cerdo la más utilizada; preparados con especies y condimentos, productos vegetales, picadas o no, para luego ser introducida esa mezcla en tripas artificiales (de colágeno, fibrosa o de poliamida) o naturales (partes del aparato digestivo y vejiga de ovinos y bovinos, generalmente).

Este tipo de alimento está presente en la dieta infantil, por lo sencillo y rápido de preparar, sin embargo es conveniente conocer la composición de los embutidos, por el alto contenido de grasa que puedan tener, para así ser consumidos de forma moderada.

Aparte, es importante tener en cuenta la procedencia y con qué tipo de carne está elaborado, ya que de esto va a depender lo saludable de la alimentación, sin perjudicar el organismo.

Requisitos de los componentes de los embutidos

  • Carnes: por lo general son de vacuno o porcino, deben ser mantenidas a una adecuada refrigeración y ser abundante en pigmentos para poder ofrecer el color típico. La carne más utilizada es la de cerdo, por lo cual debe ser firme y magra.
  • Grasas: éste es el componente principal de los embutidos, debe ser dura, ya que las grasas blandas pueden llegar a acelerar el proceso de enranciamiento y dejar un sabor desagradable.
  • Agua: permite que la mezcla no se caliente durante el proceso de fabricación. La humedad permitida está entre el 30% al 45%.
  • Sal y azúcares: son usados para dar sabor a la mezcla, aparte la sal interviene como conservante que ayuda a proteger de la contaminación de microorganismos.
  • Aditivos alimentarios: pueden ser conservantes para alargar la vida útil de los embutidos, antioxidantes para evitar el mal sabor que puedan producir las grasas, colorantes para un mejor aspecto, y condimentos y especies.

 

¿Cómo se clasifican los embutidos?

Los embutidos son productos muy famosos y su consumo se extiende a nivel mundial. Es una forma de consumir carne preparada de manera fácil y rápida, ya que si no se tiene tiempo suficiente para cocinar, puede sacar de apuros en un momento determinado, también se utiliza para meriendas.

Muchas son las empresas dedicadas a la fabricación de embutidos de excelente calidad, entre ellas destaca Embutidos Ibéricos de Los Pedroches, con tradición y años de experiencia, en las cuales se pueden adquirir embutidos garantizados con denominación de origen.

Su clasificación es muy variada, entre las tantas que hay se pueden diferenciar algunas según su principal ingrediente, como serían de carne, vísceras y fiambre crudos; y una de las más comunes: embutidos frescos, secos y fiambres, que se describen con más detalle a continuación.

  • Embutidos frescos: son fabricados en crudo, de uno o varios tipos de carne, picada gruesa o fina, mezclado junto con otros ingredientes como especies, sal y conservantes. No son cocidos, por lo tanto tienen tendencia a ser muy perecederos, lo cual deben ser consumidos en un período de tiempo corto. Entre este tipo de embutido se pueden nombrar: butifarra cruda y longaniza.
  • Embutidos secos: son elaborados a través de un proceso de cocción, fermentados, curados y pueden ser también ahumados. Al igual que los embutidos frescos, se fabrican con carne picada y otros ingredientes como pimentón, arroz, anís y queso, lo que permite así variar su sabor. Entre los principales tipos de estos embutidos se encuentran: chorizos, androlla, botillo, chistorra, morcilla, mortadela, salchichón, salami, lomo embuchado, y otros.
  • Fiambres: se fabrican mezclando trozos de carnes, junto a otros ingredientes como féculas, soja, harina, y formando una pasta homogénea en la cual no se distinguen las partes de la carne, pueden ser ahumadas también. Dentro de este grupo se encuentran las salchichas, jamón o fiambre de pavo, por ejemplo.