Enrique Garrote Dominguez •  Negocios y Ocio •  05/03/2019

Sandbox financiero: el nuevo recurso que sitúa a España como líder europeo en innovación financiera

El sistema financiero se enfrentará en pocos años a una gran transformación que promete revolucionar el negocio bancario. A día de hoy, administraciones públicas y las empresas líderes del sector están impulsando todo tipo de cambios regulatorios con el único objetivo de convertir a España en uno de los países líderes en la Unión Europea en lo referente a la innovación en el sector financiero.

Sandbox financiero: el nuevo recurso que sitúa a España como líder europeo en innovación financiera

La entrada en vigor de la normativa europea PSD2, en la que los datos de los clientes bancarios ya no pertenecen a las entidades sino a los propios clientes, está propiciando el nacimiento de todo tipo de iniciativas open banking de la mano de empresas fintech que sin duda transformarán digitalmente el sector financiero. Este apoyo al sector fintech ha sido posible además gracias a la aprobación del proyecto de ley de «medidas para la transformación digital del sistema financiero» hace menos de un año. 

Sandbox financiero o la «experimentación segura»

Gracias a la aprobación del proyecto de ley se hace posible la creación del conocido como «sandbox financiero» para la experimentación de todo tipo de iniciativas de banking as a service que se pueden implantar tras la aplicación de la normativa PSD2. El objetivo prioritario, además de contribuir a la transformación digital del sector financiero español, es proteger a los clientes a la vez que se potencia la eficiencia de las entidades financieras.

Gracias al sandbox regulatorio, las empresas o startups del sector financiero disfrutan de un espacio controlado y regulado donde hacer pruebas bajo vigilancia de los supervisores y con todas las garantías para los usuarios participantes en caso de que sea necesario la participación de clientes reales. 

Con ello se ha creado un sistema que conjuga a la perfección la seguridad y la legalidad respecto al sector financiero con la flexibilidad a la hora de experimentar nuevos productos o servicios de índole financiero. Es por tanto un paso en firme y hacia adelante para que el sector de las fintech o de las insurtech puedan probar sus innovadoras soluciones financieras en un entorno controlado, pudiendo comprobar con ello la viabilidad, la eficiencia o la utilidad de las mismas.

Este cambio legislativo puede ser el impulso que el sector necesita y se espera que atraiga a inversores con los que las empresas innovadoras puedan dar el salto al mercado definitivo. La reducción de costes gracias a la experimentación segura supone una oportunidad que empresas del sector financiero, pero sobre todo startups y fintechs, no deben dejar pasar. 

A la vanguardia europea en innovación financiera

Este cambio legislativo contribuirá a que en España surjan todo tipo de iniciativas con tecnologías disruptivas que nos sitúen a la vanguardia a nivel europeo en el sector financiero. Hasta el momento, la estricta regulación existente en España en el sector financiero suponía un auténtico freno al nacimiento de nuevos modelos de negocio en el sector, así que la puesta en marcha del sandbox supone un soplo de aire fresco a un sector necesitado de apoyos por parte de la administración.

Con ello el mercado español se situará al nivel de los mercados financieros más innovadores del mundo, que son los de Estados Unidos y Reino Unido, que también han dado pasos para aligerar las regulaciones con el objetivo de que surjan ideas disruptivas y modelos de negocios innovadores en el sector financiero. Situarnos a la vanguardia internacional permitirá crear empleo en nuestro país e incluso atraer talento extranjero, algo que además repercute en la imagen de la Marca España en el exterior.

Entidades y líderes empresariales del sector han visto con buenos ojos la aprobación y puesta en marcha del sandbox financiero así como de la implementación definitiva de la normativa europea PSD2, que conjuntamente podrían llegar a convertirse en el impulso definitivo para que la innovación financiera sea un sector potente y cada vez más importante en nuestro país.

Y es que tan solo hay que echar un vistazo a los grandes resultados de los «sandboxes» aprobados en otros países, como Reino Unido o Australia, para ser optimistas y afirmar que asistiremos en los próximos años a lo que sin duda será un antes y un después en el sector financiero de nuestro país y su capacidad de innovación.