Los sindicatos de inquilinos exigen al Gobierno una regulación de los alquileres

Los Sindicatos de Inquilinos se reunieron el jueves con David Lucas, Secretario General de Vivienda, para exigirle que se tomen medidas urgentes para acabar con las subidas de alquiler en pleno contexto de inflación. Mientras el Gobierno aprueba medidas como la contención del coste de la energía o el abaratamiento del transporte público, no se aborda el principal gasto de los hogares: la vivienda.

Justo antes de la reunión que representantes del Sindicat de Llogateres de Catalunya y el Sindicato de Inquilinas de Madrid mantuvieron con Lucas en el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, se encontraron también con los grupos políticos de la izquierda del arco parlamentario (ERC, EH Bildu, Podemos, BNG, Más País, Compromís, En Comú Podem, CUP) para exponerles su propuesta. La necesidad de implementar medidas urgentes para revertir la subida de los alquileres fue sido aplaudida y asumida por todos ellos.

Evitar subidas a la finalización de los contratos y revertir la inflación en los alquileres

Si bien el Gobierno aprobó la limitación a partir de abril de las actualizaciones interanuales de los contratos de alquiler al 2%, esta medida es del todo insuficiente. En primer lugar, porque se aprobó tarde, y muchos hogares sufrieron subidas desproporcionadas de alquiler entre octubre y marzo de ese mismo año que nunca fueron revertidas. En segundo lugar, porque esta limitación no afecta a las renovaciones de contrato, por tanto, cada mes miles de inquilinos a quienes se les finaliza el contrato se enfrentan a subidas totalmente descontroladas e inasumibles. Y en tercer lugar, porque un redactado absolutamente deficiente de la norma ha incentivado a muchos arrendadores a desinformar a los inquilinos para que firmasen pactos que les perjudicaran.

Para proteger a los hogares inquilinos frente a subidas de alquiler y revertir la asfixia económica agravada por la inflación, los sindicatos han propuesto a Lucas un conjunto de medidas coyunturales y temporales que deberían aprobarse urgentemente en el marco de las medidas anticrisis en el próximo paquete. En primer lugar, exigen la congelación de los alquileres a través de prórrogas obligatorias de contratos para evitar subidas o expulsiones en las finalizaciones de contrato, como ya se están viviendo. En segundo lugar, las actualizaciones interanuales de los precios del alquiler, antes vinculadas con el IPC y ahora limitadas al 2%, deben eliminarse, es decir, pasar al 0%. Por último, exigen revertir las actualizaciones de alquiler realizadas desde el 31 de octubre del 2021 hasta marzo de 2021.

Las actualizaciones sufridas por miles de familias han supuesto una asfixia importante, con subidas del 10% (más de 100€ mensuales en varias ciudades), mientras que los salarios no han subido. El Gobierno dice gobernar para las clases populares y la clase media, pero debe actuar con contundencia frente a la especulación. Si para controlar el precio de la luz, hace falta tocar los beneficios de las eléctricas, para controlar el precio de la vivienda hay que tocar los beneficios del rentismo inmobiliario.

Medidas urgentes y temporales hasta la aprobación de la ley vivienda

Los Sindicatos subrayamos que estas medidas deben ser de carácter urgente, para hacer frente a la inflación, y temporal, hasta la aprobación de la Ley Estatal de Vivienda que se está tramitando en el Congreso de los Diputados. Este proyecto de ley sigue estancado debido al inmovilismo del PSOE en el proceso de negociación con los grupos parlamentarios de los cuales depende la aprobación de la norma. Dichos grupos ya han expresado repetidamente que no darán el sí a una ley que no incorpore las tres demandas básicas del movimiento por la vivienda: regulación de alquileres efectiva, obligación de ofrecer alquileres sociales a las familias vulnerables antes del desahucio e incorporación de todos los bienes raíces de la SAREB al parque público de vivienda.

La Ley de Vivienda fue un compromiso de este gobierno desde el inicio de la legislatura. Su inacción e incumplimiento está desprotegiendo a miles de hogares inquilinos en un contexto de altísima inflación. Hace falta activar las medidas urgentes presentadas por las organizaciones inquilinas y aprobar lo antes posible una Ley Estatal de Vivienda efectiva y útil.