Notitia Criminis •  01/07/2009

Agustín Jiménez Crespo, alcalde de Noblejas, Toledo, fue grabado mientras agredía a una de las concejales de su equipo de gobierno

Esta semana la revista Interviú pone al día la noticia de unos hechos ocurridos en diciembre de 2008, los cuales pasaron desapercibidos en Castilla-La Mancha y no sin la inapreciable ayuda del gobierno de Barreda y del propio PSOE regional, que cada día que pasa demuestra más tener sus propias reglas.

Como digo, en diciembre de 2008 un individuo que atiende al nombre de Agustín Jiménez Crespo, alcalde de la localidad toledana de Noblejas desde 1983 hasta la fecha y que, además, ha desempeñado diversos cargos en la Administración regional bajo los gobiernos de José Bono y del propio Barreda; empujó, retorció un brazo y propinó un puñetazo en la cara ―según informa Interviú― a la concejal de su propio partido Belén Gutiérrez.

La agresión, miserable añado yo, fue recogida por las cámaras de seguridad del Ayuntamiento y, a pesar de la mala calidad del video (es aconsejable descargar el archivo para poder reproducirlo en un formato mayor) ésta se puede apreciar claramente. Sucede al fondo de la imagen, hacia la mitad de la grabación, junto a la columna amarilla que se aprecia en la sala. En principio el tal Agustín Jiménez entra, con camisa blanca, seguido de varias personas, entre ellas Belén Gutierrez. En un momento dado, el alcalde se vuelve, empuja violentamente a la concejal hasta arrinconarla y allí consuma la agresión.

Poco después, durante un acto celebrado en la localidad, la propia Belén Gutierrez puso los hechos en conocimiento del consejero del gobierno de Barreda, Fernando Lamata. Lamata, a quien también se le conoce en Carranque por respaldar públicamente al imputado por corrupción Alejandro Pompa, continuó el acto junto al alcalde Agustín Jiménez reiterando “el compromiso del gobierno de Barreda” con los pueblos de la región.

Se da la circunstancia de que el Ayuntamiento de Noblejas tiene cierta tradición en organizar actos contra la violencia de género. Así, por ejemplo, en noviembre de 2006, este pueblo toledano acogió los actos del Día Internacional Contra la Violencia de Género. En esos actos intervinieron José María Barreda y el propio Agustín Jiménez.

Barreda, fiel a su estilo pastoril, dijo que “es inaceptable que un hombre abuse de una mujer”, que “un maltratador es un tirano y hay que censurarlo cuando utiliza la fuerza desde su posición superior” o que los malos tratos “no son un asunto privado. Nos incumbe a todos. No podemos dejar indefensa a la víctima”.

A continuación tomó la palabra Agustín Jiménez, el ahora condenado por agredir a Belén Gutiérrez, y mostró su satisfacción “porque hoy esta localidad sea referencia de igualdad entre hombre y mujeres y de lucha contra los malos tratos”.

Con este, que se sepa, ya son dos los alcaldes de Toledo condenados por agredir a personas indefensas o en situación de inferioridad. Agustín Jiménez Crespo, que según sentencia de primera instancia es culpable por golpear a una mujer, y Alejandro Pompa, condenado en firme ―la noticia se puede descargar desde aquí― por abofetear a un anciano de 82 años.

Sin duda, el gobierno de Barreda parece estar muy comprometido en “censurar” a aquellos individuos que utilizan la fuerza “desde su posición superior” y a los que el propio Barreda tacha de “tiranos”, pero como las cosas de este mundo tienen que ser consistentes, podemos apostar a que en Noblejas hay importantes intereses que, a la vista de los responsables del PSOE toledano y del presidente Barreda, justifican sobradamente que individuos como Agustín Jiménez o Alejandro Pompa no hayan sido “censurados”, sino que por el contrario, sigan disfrutando de la protección del partido, de sus responsables y del propio Gobierno de Castilla-La Mancha.


Notitia Criminis /