La vida en el panel derecho de El Jardín de las Delicias •  26/03/2014

Antidisturbios Indignados.

Antidisturbios Indignados.

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Después de las Marchas por la Dignidad algo ha cambiado en este país. Un colectivo nuevo se ha sumado a la indignación contra este gobierno, y es que los antidisturbios también son trabajadores al fin y al cabo. Por eso se han concentrado para clamar contra las autoridades gubernativas y los mandos policiales que les hicieron acudir a la manifestación del sábado, y que parece que no tenían muy clara la manera de reaccionar frente a los 50.000 delincuentes neonazis que fuimos a acabar con el estado de derecho y la democracia. Los muchachos tuvieron suerte. La protesta fue espontánea, y por eso mismo dudo que tuviese los permisos necesarios, pero aun así nadie fue a decirles nada a los policías. Ni los disolvieron a palos, ni los multaron, como ha ocurrido tantas veces con trabajadores que se han concentrado para exigir sus derechos… Claro que tampoco sé quién es el encargado de pegarle a los antidisturbios cuando son ellos los que  incumplen la ley.

Ya advertí en mi última entrada que la campaña contra las Marchas sería fuerte y he acertado. Lo que para la prensa extranjera y el sentido común fue más de un millón y medio de manifestantes -y algunos energúmenos que la liaron parda- clamando contra los recortes, para los que sólo sigan informativos y prensa de aquí, el 22 M fue poco menos que una acción perpetrada por unos pocos  miles de vándalos, que al acabar la mani, encima quisieron enturbiar la memoria de Adolfo Suárez atacando el sistema que este gran hombre creó para reconciliar a los españoles.

Para desprestigiarnos, ahora se han centrado en los personajes que, a cara tapada, tuvieron a bien demostrar su hombría, atacando a los policías de una manera que sólo podría ser definida como vil y cobarde. Yo creía, a tenor de las portadas del día siguiente, que iban a pasar de nosotros, pero no. Si encendemos el televisor ahora seremos bombardeados con imágenes que nos muestran a personas lanzando adoquines a la poli, o hiriendo a un pobre periodista que pasaba por ahí, o quemando contenedores,… Para dejar claro que el ataque fue burro, incluso se ha presentado a la opinión pública imágenes de pruebas del material intervenido que al final –vaya por Dios- han resultado ser falsas.

Es curioso, pero lo que no aparece en ningún informativo, debate o artículo es porqué la policía empezó a atacar a los asistentes antes de que acabase la manifestación, como tampoco explican qué hacían elementos policiales infiltrados entre los manifestantes. No se dice nada del chico que ha perdido un testículo, ni del resto de los heridos por pelotazos de goma que fueron alcanzados directamente, pero lo más asombroso de todo, es que no se informa siquiera de los motivos por los que más de un millón de personas decidieron ir a Madrid en columnas venidas desde toda España.

Desde luego la violencia es cosa mala, pero violencia no es sólo la que se ejerce de manera explícita, ¿O acaso no es violencia que dejen a familias en la calle? ¿O que haya niños desnutridos en este país? ¿O que aumente la brecha entre ricos y pobres mientras la mayoría de los españoles está siendo condenada? Es cierto que las imágenes de los ataques a la policía son duras, pero también me lo han parecido otras veces las de los antidisturbios pegando a los niños del IES Luis Vives, o las de los inmigrantes que murieron ahogados y que fueron atacados con pelotas de goma, o las de la mujer que perdió un ojo en la última huelga general, o las de…bueno, si empiezo no acabo, ya saben lo que quiero decir.

La única diferencia entre unas y otras salvajadas es que los responsables de atacar a los policías el 22M serán castigados de acuerdo a la ley, mientras que todavía estamos esperando justicia en infinitas causas, que a veces ni siquiera llegan a juicio, por abusos de poder por parte de elementos de las fuerzas de seguridad del estado. La policía en este país tiene el monopolio del uso de la violencia, y por eso mismo debe actuar con mucho sigilo a la hora de ejercerla. Por supuesto todos los policías no son unos sádicos, pero a tenor de lo visto en los últimos tiempos, alguno debería compartir celda con el mismo energúmeno que supuestamente tiró un adoquinazo a un policía aprovechando que éste había perdido el casco.


La vida en el panel derecho de El Jardín de las Delicias / 

Alejandro Sánchez Moreno (Sevilla, 1982.)

Profesor de secundaria e historiador. Actualmente es doctorando de la Universidad de Málaga en una tesis sobre los inicios del comunismo andaluz. Realizó sus estudios en las universidades de Sevilla, Toulouse II Le Mirail, Complutense de Madrid y Autónoma de Madrid. Ha trabajado desde hace años en el campo de la docencia. Es miembro de la Fundación de Investigaciones Marxistas y de los órganos locales del PCE e Izquierda Unida en Sevilla.

Sus publicaciones han girado fundamentalmente hasta ahora en torno a estudios historiográficos, siendo autor de diversos artículos publicados en Chile y España.

Su primer relato de ficción “La Catarsis de Clío”, fue seleccionado por la Latin Heritage Foundation para formar parte de un libro recopilatorio de “jóvenes promesas de la literatura hispanoamericana” (Hijos de la Pólvora. Antología de relatos hispanoamericanos, Latin Heritage Foundation,Washington, 2011.)

El autor del blog ha presentado recientemente su primer libro “José Díaz, una vida en lucha”, biografía del dirigente obrero José Díaz Ramos que ha sido publicada por Almuzara y además, próximamente verá la luz su segunda monografía sobre un importante episodio represivo de la Andalucía franquista.