El desmantelamiento de la infraestructura del POUM (Crónica del 16 de junio de 1937)
El 17 de mayo, una carta dirigida al Presidente de la Generalidad de Cataluña, y enviada por el PSUC, Accion Catalana Republicana, Izquierda Republicana, Estat Catala y UGT, acusaban al POUM de actuar en contra del Gobierno republicano, de haber destrozado la economía agrícola, y de ser unos suicidas al levantarse en armas contra el Gobierno de Cataluña. Finalizaron la carta pidiendo «la disolución inmediata del POUM por considerarlo un partido neofascista.
El periódico italiano «Il Crido del Popolo» del 14 de enero, decía en una de sus corresponsalías de Barcelona: «¿ y los trotskistas del POUM? en medio del entusiasmo en este nuevo y grandioso esfuerzo que el pueblo está cumpliendo, estos agentes del fascismo organizaron durante varios días consecutivos, el recorrido por la ciudad de un camión con una enorme inscripción: ! Organizamos la lucha contra el fascismo en el frente y la lucha contra el reformismo en la retaguardia! estos contrarrevolucionarios llegan a tal vileza que se guardan bien de pelear en el frente contra el fascismo, pero en cambio en la retaguardia están prontos para combatir el reformismo, combatiendo, por lo tanto, los esfuerzos del Frente Popular para poner en pie de guerra a la Nación. ¡Pero el pueblo de España haciendo justicia a estos bandidos, camina derecho a la Victoria!.»
El periódico «Mundo Obrero», órgano del Partido Comunista de España, afirmó en su número del 29 de enero: «Debemos luchar sin tregua contra los elementos trotskistas. Son los mejores colaboradores de Franco en nuestro país…
El POUM es un puesto avanzado del enemigo en nuestro propio campo… En todo movimiento revolucionario los más peligrosos son aquellos que se disimulan bajo el manto de la amistad, para luego asesinar por la espalda. En toda guerra los más peligrosos no son los enemigos que ocupan las trincheras del frente, sino los espías y saboteadores y el POUM se encuentra entre estos.»
En su número del 27 de enero, «Ahora» órgano de la Juventud Socialista Unificada, decía: «Liquidemos de una vez para siempre esta fracción de la «quinta columna». El pueblo soviético, con su implacable justicia contra el grupo de los saboteadores y asesinos trotskistas, nos señala el camino.»
Con el fracaso del «levantamiento de mayo, el orden republicano fue restaurado.
En las semanas siguientes, el POUM fue acusado de instigar la insurrección. El 17 de mayo, una carta dirigida al Presidente de la Generalidad de Cataluña, y enviada por el PSUC, Accion Catalana Republicana, Izquierda Republicana, Estat Catala y UGT, acusaban al POUM de actuar en contra del Gobierno republicano, de haber destrozado la economía agrícola, y de ser unos suicidas al levantarse en armas contra el Gobierno de Cataluña. Finalizaron la carta pidiendo «la disolución inmediata del POUM por considerarlo un partido neofascista.
Y hoy, en Valencia, el nuevo Gobierno republicano de Negrín, tras la dimisión de Largo Caballero, ha prohibido el periódico «La Batalla» órgano de ese partido y ha ilegalizado al mismo. Asimismo, han resultado detenidos como miembros del POUM: Julián Gómez (Julian Gorkin, director del periódico), Juan Andrade, Andreu Nin (Secretario político), Enrique Adroher, Pedro Bonet, José Escuder y Daniel Rebull, en su sede central de Barcelona, el hotel «Falcon» (1).
El juez especial que instruye las diligencias de la Organización ha comenzado su actuación, haciendo declarar a los agentes, que a las órdenes del inspector Gómez Serrano, han realizado este servicio.
(1) Con posterioridad, casi todos ellos, así como figuras trotskistas conocidas mundialmente, George Orwell, Arthur Koestler, etc, trabajarían para los servicios secretos británicos y la CIA.
Fuente: Federico Rubio Herrero (Cronología mundial durante seis meses vitales, enero-junio de 1937).