Porque, no se olvide, el presente es hijo del pasado
Estamos en un cambio de ciclo. Un ciclo iniciado en 1443 por Enrique el Navegante (que nunca navegó), llamado así por impulsar las primeras expediciones marinas portuguesas en busca de nuevas rutas de comercio. Le siguieron las españolas, que, en 1492, cambiaron el mundo para siempre. Entre los siglos XVI y XVIII, España, al tiempo que sus naos expandían la geografía del mundo, erigió el primer imperio oceánico de la historia, cuyo control y dominio no dependía de fuerzas terrestres que se movían sobre espacios terrestres, sino de una poderosa marina, militar y comercial. Los imperios que le siguieron – británico, francés, holandés, estadounidense – lo hicieron sobre aquel modelo.
Es el comienzo de un libro que puede ser parte fundamental para entender lo que ocurre en los días en que nos ha tocado vivir, se lo recomiendo – seguiremos escribiendo sobre lo que dice -, su título: De Ucrania al mar de la China. Autor: Augusto Zamora R. Editorial AKAL.
Ahora nos situamos en algunos de los acontecimientos que han marcado nuestro tiempo, que proviene de lo hecho por la potencia imperial última que ha seguido, como dice en la última línea del libro mencionado, “aquel modelo.”
Me llamo Yanajido. Trabajo en Nagasaki y había venido a ver a mis padres en Hiroshima*. Ahora, ellos han muerto. Yo sufro mucho por esta pérdida y también por mis horribles quemaduras. Ya sólo deseo volver a Nagasaki con mi mujer y con mis hijos.
Dada la confusión de estos momentos, no creo que pueda llegar a Nagasaki enseguida, como sería mi deseo; pero sea como sea, yo camino hacia allá.
No quisiera morir en el camino. ¡Ojalá llegue a tiempo de abrazarlos!
Autor, el gran dramaturgo Alfonso Sastre, muchas de sus obras fueron prohibidas y cuando no ocultadas al público, obligandole a exponer sus obras en otros países. El presente texto figura el el libro titulado Cuento español de Posguerra. Edición de Medardo Fraile. Editorial Cátedra.
*Como es bien sabido – y comienza a olvidarse -, se arrojó la primera bomba atómica sobre Hiroshima el 6 de agosto de 1945 a las 8,15 de una soleada mañana de verano, y la segunda bomba cayó, tres días más tarde, en Nagasaki … Su horror hizo escribir a Alfonso Sastre muy poco después una de sus primeras obras, Uranio 235, estrenada en el teatro Infanta Beatriz, de Madrid, el 11 de abril de 1946 por Arte Nuevo.
Quienes tiraron las dos bombas atómicas el 6 y el 9 de agosto de 1945 sobre dos ciudades japonesas asesinando a centenares de miles de personas en un momento, son los creadores del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional en julio de 1944, Bretton Woods, Nuevo Hampshire, EEUU; después de tirar las dos bombas atómicas, 6 y 9 de agosto de 1945, fueron parte de los creadores de la ONU el 24 de octubre de 1945, San Francisco, EEUU; no transcurrió mucho tiempo para que sacase a la luz uno más de sus monstruos conque sangraría al mundo, la CIA, el 26 de julio de 1947; y el que en nuestros días es empleado para lo que han dado en llamar el “ el gran reseteo” o “gran reinicio”, el plan expuesto por la élite imperialista en el Foro Económico Mundial en Davos con el que abrir la nueva era del capitalismo imperial, dominio bajo el que desaparezcan las independencias, las soberanías, los Estados y los gobiernos como se entienden hoy, para imponer un gobierno único que moldee el mundo a los intereses de la minoría imperial. Ese propósito lo han puesto en marcha en el día de hoy con la alimentación de la guerra de Ucrania, y para eso han declarado que su finalidad es “hacer sangrar a Rusia hasta debilitarla y dividirla en múltiples pedazos” para después poder atacar a China, pues son los dos países que como potencias se oponen a tal propósito imperial.
EEUU presenta su objetivo a conseguir con el monstruo titulado OTAN, monstruo que crearon el 4 de abril de 1949 en Washington. Como vemos las herramientas con las que el imperio ha ido dominando hasta hoy las creó a partir de 1945.
Bombas atómicas. Control del dinero y los fondos financieros de los países de todo el mundo. La gran burguesía estadounidense, un clan minoritario que no alcanza ni el 1% de la población y que ha llegado a tener 6 de cada 10 dólares que circulan por el mundo, ha comprobado desde hace años que el sistema empleado esta en crisis contínuas y cada vez mayores, es poco productivo y su capacidad de autodestrucción es cada día más evidente y no tiene salida. La clase en el poder, los dueños de la Casa Blanca y del Pentágono, han concebido la idea monstruosa de resolver su ineficacia fabricando armas para dominar a todo el mundo, emplean más de 700.000 millones de dólares cada año y van en aumento, y avisan que nos tienen bajo amenaza atómica, lo ha advertido hasta el propio Kissinger.
Disponen del mayor aparato de propaganda conocido, que empleado como un arma de dominación de pensamiento conduce a los pueblos de Europa y de América del Norte, principalmente, manteniendo el ideario fascista en su cabeza a las puertas de las catástrofes del hambre y las pestes, (sus numerosos biolaboratorios en más de 40 países del mundo produciendo enfermedades desaparecidas y nuevas han sido descubiertos a partir de lo sucedido en Ucrania) que quieren imponer como medio para reducir la población mundial y establecer el dominio que proyectan con el “gran reinicio”.
A la guerra militar y económica-financiera, la acompañan con la guerra propagandística llegando a denominar a la mentira la “posverdad”, y para ello prohíben toda opinión, argumentación o demostración que no sostenga su propósito. El tratamiento en ese campo dado a lo acontecido en Ucrania es una pequeña muestra del mundo que traen. En la mentira como arma de guerra militan las organizaciones periodísticas creadas por el gran capital, y a lo largo de la Historia su papel desarrollado ha sido la defensa del amo, y cuando alguien los ha descubierto, caso Julián Assange, la crueldad aparece como castigo. Les traigo aquí un ejemplo viejo, una campaña de propaganda en el Estado español durante la dictadura de Primo de Rivera, (1923-1930), que hoy se repite multiplicado por todo el “aparato militar propagandístico”: “El Caballero Audaz, un escritor llamado José María Carretero, fue financiado por el gobierno de Primo de Rivera para difundir en París el folleto antiblanquista titulado “El Novelista que vendió su Patria o Tartarín, revolucionario (triste historia de actualidad)”, en el que, entre otras falacias, se aseguraba que Rusia soviética había cedido al escritor valenciano Vicente Blasco Ibáñez, un millón de francos para su tarea de acoso a la monarquía. El folleto fue convenientemente jaleado por la prensa derechista a sueldo del embajador español, pero Carretero fue agredido por Esplá, secretario personal de Blasco, en la noche del 27 de diciembre de 1924 y llevó el asunto a los tribunales, quedando en evidencia ante la opinión pública francesa como engranaje de una trama de acoso urdida por un gobierno extranjero.” Bajo la bandera de la falsificación informativa se organizan equipos mercenarios que hacen el trabajo de control del pensamiento que el imperio necesita para seguir en su reelaboración del capitalismo. Llama la atención que en la capital de un estado sometido, una provincia del imperio donde se han colado las grandes mentiras, ¿recuerdan aquello de “OTAN de entrada No”?, se viene a celebrar la Cumbre de la OTAN en Madrid los días 29 y 30 de junio.
Esos que se van a reunir en Madrid bajo el mando de EEUU son la pequeña parte del mundo que quiere hacerse pasar por mayoría, la pequeña parte dictatorial que salta por encima de todos los Acuerdos de Derechos de los Pueblos, de Derechos Humanos, son los mismos que hoy tienen al mundo ante la perspectiva de la guerra atómica.
Les dejo con uno de los Tres sonetos Anti-OTAN que en su día escribió Benjamín Prado:
“Esta es la paz vestida con galones. /Esta es la paz atada a una cadena. / Esta es la paz que baila en la verbena / de las terribles bombas de neutrones. / Esta es la paz sembrada de explosiones. / Es la paz entre gritos de sirena. / Esa es la paz escrita por la arena / que borraría un mar con portaviones. / Nos ofrecen sus tristes generales, / sus corazones tridimensionales, / la larga noche gris de los tiranos. / Y qué dolor de libertad perdida, / qué extraña paz ofrecen, esparcida / entre fusiles norteamericanos.”
Son los mismos de todas las guerras del siglo XX y lo que llevamos del XXI, en Europa y fuera de Europa, son los mismos de todas las invasiones y destrucción en Oriente Medio, son los mismos de los golpes de Estado en Latinoamérica, los mismos que invaden Somalia en estos días, los mismos que alimentan al sionazismo contra Palestina, los mismos que bloquean y sancionan a 60 naciones en el mundo, los mismos que quieren hacer una Cumbre de las Américas sin Cuba, Nicaragua ni Venezuela, todo un fracaso anunciado, mientras en Cuba se han reunido todos los países de Latinoamérica en la Cumbre del ALBA – TCP, en la que el Presidente de Cuba Miguel Díaz Canel ha declarado: “Son tiempos de defender con dignidad la América nuestra”, reafirmando la soberanía de la Isla Rebelde, una aspiración de cualquier pueblo que busca ser libre de imperialismo, la única salida a la opresión, al “gran reseteo”.
Porque, no se olvide, el presente es hijo del pasado.
Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de AMANE. Miembro de la Asociación Europea de Apoyo a los Detenidos Palestinos. Miembro de la Red en Defensa de la Humanidad (REDH). Miembro del Frente Antiimperialista Internacionalista e integrante de la Red de Artistas, Intelectuales y Comunicadores Solidarios con Nicaragua y el FSLN.
Su último libro: Palestina es Palestina