De sueños colectivos
La imposición del individualismo en todas sus expresiones (personales y colectivas (desde el deseo de consumo hasta el voto delegado), por encima de la empatía y la colectividad, es un gran triunfo del capital. Se normalizan formas competitivas e insolidarias de entender, ser y actuar en este mundo, que destruyen el nosotras y nosotros, las comunidades y la vida que sostenemos y nos sostiene hasta ahora.
Este individualismo no se propaga exclusivamente en los centros de reproducción del poder dominante, sino también en muchos espacios sociales, organizados, en los que la competencia y la priorización del yo político sobre el conjunto avalan decisiones y liderazgos verticales, no consensuadas y/o no relegitimadas, carentes de reflexión y construcción colectiva.
El cultivo de lo individual va acompañado del pensamiento único y descomplejado, lineal, sin matices, construido con fragmentos inconexos, generalmente carente de historia pasada y futura, que fácilmente conduce a la verdad incuestionable e irrebatible, también presente como paradigma en espacios diversos.
Así, el pensamiento adecuado en una sociedad edificada para la individualización es esquemático, estático, acrítico y homogeneizador. Es la verdad o la razón del más fuerte o de quien tiene medios más adecuados para difundirla. Esta razón y esta forma de razonar niegan cosmovisiones milenarias, integrales y totalizadoras (totalizar en el sentido de capacidad de abarcar diversas ideas, acciones y actorías, así como sentidos múltiples de vida), construidas para la interrelación de todos los seres vivos y elementos que conforman la existencia. También de saberes recientes, como los saberes feministas que, al situar la vida en el centro de su proyecto político, constituyen otros referentes de integralidad y articulación.
La respuesta a la depredación cultural (cultural-económica-política-simbólica-de los usos del poder) tiene que ser igualmente cultural, visibilizando especialmente las acciones que ya están sucediendo y los múltiples momentos de interrupción del espacio-tiempo de la dominación, que es el espacio tiempo de la persona en individualidad, para reconstruir el espacio tiempo de la persona completa, en colectividad.
Andrés Cabanas www.memorialguatemala.blogspot.com