Manifiesto argentino por el reconocimiento de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD)
El movimiento solidario argentino con el pueblo saharaui ha lanzado una campaña de recolección de firmas para que el gobierno argentino reconozca a la República Árabe Saharaui Democrática, único país árabe-africano de habla hispana -cuya proclamación data del 27 de febrero de 1976- que cuenta ya con el reconocimiento de 27 países de América Latina y el Caribe.
Cabe destacar que este manifiesto está acompañado por centenares de firmas de personalidades de la política, instituciones, activistas de derechos humanos, e integrantes de las áreas académica, sindical, artística, estudiantes, periodistas, etc.
Para adherir al mismo, es necesario enviar nombre y apellido, DNI, ocupación o cargo y ciudad argentina de pertenencia. Esos datos pueden dirigirse al correo electrónico: manifiesto27febrero@gmail.com
Reproducimos, seguidamente, el texto del mismo:
Reconocer el Estado Saharaui es defender la justicia y la dignidad
El 14 de diciembre de 1960 la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través de la Resolución 1514 estableció la descolonización de todos los territorios en todos los lugares del planeta. El 11 de diciembre de 1963 la Asamblea General de la ONU mediante la resolución 1956 (XVIII) incluye al “Sahara Español” en un listado de Territorios No Autónomos (TNA) en espera de descolonización, y reafirma el derecho de autodeterminación de la población autóctona mediante la aplicación de la resolución 1514 (XV) de la Asamblea General de Naciones Unidas.
A partir de esta normativa se emiten una serie de resoluciones de la ONU en favor de la descolonización, y de la libre determinación del pueblo saharaui, (Res. 2229, 1966; 380, 1975; 3458 A, 1975), como así también actos que reafirman los rechazos de la ocupación marroquí en el territorio del Sahara Occidental, y a los Acuerdos Tripartitos de Madrid, entre España, Marruecos y Mauritania (1975) y la “Marcha verde” (1975).
La monarquía marroquí ha violado todas las resoluciones de la ONU orientadas a la realización de un referéndum de autodeterminación. Estos registros se han dado especialmente cuando misiones de las Naciones Unidas, constataron que la gran mayoría de la población saharaui estaba a favor de la independencia.
En el siglo XIX España ocupa el Sahara Occidental, y en estos tiempos dos tercios del territorio permanecen bajo ocupación del Reino de Marruecos. La historia parece marcar la continuidad de la tragedia para los saharauis, pero el emergente liberador fluye en todos los rincones demandando autodeterminación y soberanía, consignas que consolidan día a día el reconocimiento internacional de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
Las reiteradas violaciones a los derechos humanos y a la negación permanente al derecho internacional por parte de Marruecos, no han podido quebrar la voluntad firme del pueblo saharaui en el tránsito imperecedero hacia la independencia de toda la patria usurpada.
A partir del 27 de febrero de 1976 se materializa la RASD y un poco más de una decena de países de Latinoamérica y el caribe reconocen al estado saharaui, este marco de situación sigue consolidando las relaciones entre los pueblos, a pesar de las permanentes presiones y compra de conciencias y voluntades que instrumenta la monarquía marroquí.
Es urgente y necesario que todos los pueblos libres de América Latina y el caribe, herederos de una tradición de luchas anticolonialistas, refuercen el compromiso ético y proyecten las medidas y alternativas para apoyar las nobles aspiraciones de libertad del pueblo saharaui, sintetizadas en la hoja de ruta del Frente Polisario, legítimo representante de los oriundos del Sahara Occidental.
La salida pacífica y duradera a este conflicto está estampada en las resoluciones de la ONU y de la Unión Africana. En esa dirección tanto la República Árabe Saharaui Democrática, como el Frente Polisario, conductor del proceso liberador en el Sahara Occidental, están dispuestos a aceptar la legalidad internacional y los caminos que conduzcan a una consulta democrática que permita a los verdaderos originarios elegir el destino de su tierra.
La solidaridad con las gestas nobles de todos los pueblos libres del mundo, implica el reconocimiento a la causa independentista de los saharauis.
Los abajo firmantes formamos parte de instituciones intermedias y ONG, representadas en sindicatos, movimientos sociales, partidos políticos, asociaciones de solidaridad, parlamentarios, intelectuales, académicos, comunicadores sociales, artistas y escritores, argentinos que anhelamos contribuir y aportar en un espacio que tiene como objetivo apoyar y visibilizar la causa saharaui, estableciendo una agenda de trabajo que exprese la solidaridad y fortalezca la lucha por la descolonización, autodeterminación y la garantía de la soberanía territorial del Sahara Occidental.
El pueblo saharaui se ha caracterizado por ser pacífico. Sin embargo, tiene el legítimo derecho de luchar por la liberación de su patria, utilizando los medios que sean imprescindibles para el logro de los objetivos emancipadores. Han pasado más de tres décadas de inoperancia de parte de foros internacionales para dar cumplimiento definitivo al referéndum, la libertad y la autodeterminación, y está claro que los derechos inalienables de los pueblos no pueden ser postergados. La violencia ejercida por las fuerzas militares y policiales marroquíes en los territorios ocupados debe terminar. El cautiverio de la población saharaui solo irá generando mayor resistencia ante la embestida del ocupante.
Solicitamos al Gobierno argentino, como a todos los Ejecutivos latinoamericanos el reconocimiento de la República Árabe Saharaui Democrática.
Pedimos con urgencia una resolución internacional, favorable a legitimar los derechos inalienables del pueblo saharaui sobre las fuentes de riquezas en el territorio y mar del Sahara Occidental, recursos que hoy son expoliados por la fuerza ocupante marroquí.