Ejemplos de capitalismo salvaje e hipócrita de cada día
El alquiler de una vivienda en Madrid, tres meses como señal, uno a fondo perdido como seguro y pagar el mes por adelantado.
Eso no es libre mercado, eso es un abuso, es la libertad para abusar. No hablemos de unos precios disparados y que te cobran mil euros por el alquiler de un cuchitril, de una infravivienda, de un zulo, el que arrienda este tipo de viviendas debería estar en la cárcel, además es algo fácil de perseguir, basta con echar un ojo a cualquier portal de alquiler.
Recordemos que Ana Botella vendió la vivienda pública que quedaba en Madrid a fondos buitre, en esos fondos buitre «trabaja» su hijo, la familia Aznar se enriquece aprovechando la necesidad de la gente, una necesidad que la derecha provoca con sus políticas para poder abusar de la gente.
Recuerdo otro caso que conozco, en este caso era el alquiler de una habitación en un piso compartido en Tarragona, a la persona le pedían 250 euros por la habitación como precio «especial» pero tenía que hacerse cargo de la limpieza y mantenimiento de un piso donde vivían otras siete personas, el salario 200 euros al mes.
La derecha hace políticas que generan pobreza, desigualdad y el nuevo concepto del trabajador que vive en la pobreza y necesita pedir ayuda alimentaria, que no puede pagar los servicios básicos a pesar de tener un empleo.
No creo en la caridad de los multimillonarios que usan paraísos fiscales para pagar menos impuestos, o la llamada ingeniería fiscal, o usan sus donaciones para desgravar a hacienda.
Creo en la solidaridad, no en la caridad y menos cuando se hace pública, eso no es caridad, es vanidad o publicidad, una publicidad que además sale más barata.
Eduardo Galeano escribía: “la caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo”