Centre Delas d Estudis per a la Pau •  Opinión •  03/07/2016

Los fabricantes y vendedores de armas europeosque se benefician con la tragedia de los refugiados

Entre las empresas que más se están beneficiando con la militarización de las fronteras de la UE se encuentran algunas de las que están vendiendo armas a Oriente Medio, según revela un nuevo informe cuya investigación ha realizado la Campaña contra el Comercio de Armas de los Países Bajos y ha publicado en español el Transnational Institute y el Centre Delàs d’Estudis per la Pau.

El informe, Guerras de frontera, analiza el floreciente mercado de la seguridad de fronteras que ha surgido para aprovechar el objetivo de ‘lucha contra la inmigración clandestina’ anunciado por la UE, y que ha cobrado impulso tras la llegada de miles refugiados de Siria, un país asolado por la guerra. Se calcula que, en 2015, este mercado alcanzó un valor de unos 15.000 millones de dólares y se prevé supere les 29.000 millones de dólares anuales en 2022.

Después de la campaña de referendo que ha culminado con el Brexit, durante la que algunos políticos han explotado sin escrúpulos el miedo a los refugiados, el informe Guerras de frontera pone de relieve que quienes más están ganando con la tragedia de los refugiados son las empresas de armas. Además, su indebido poder e influencia en Bruselas exacerba aún más la crisis de legitimidad a la que se enfrentan las instituciones de la UE.  

Entre los grandes actores del complejo europeo de seguridad fronteriza se encuentran compañías que fabrican armas como Airbus, Finmeccanica,* Thales y Safran, así como el gigante de la tecnología Indra. Airbus, Finmeccanica y Thales son también tres de los cuatro principales comerciantes de armas europeos, y están vendiendo a países de Oriente Medio y el Norte de África, alimentando así el conflicto que es la causa de muchos de los refugiados. Entre 2005 y 2014, los Estados miembros de la UE otorgaron licencias de exportación de armas a Oriente Medio y al Norte de África por un valor de más de 82.000 millones de euros.

La respuesta normativa de la UE a los refugiados, que se ha centrado en los traficantes y el fortalecimiento de las fronteras exteriores (incluido en países fuera de la UE), ha dado lugar a un gran aumento del presupuesto que beneficia a la industria de las armas. La financiación total de la UE para medidas de seguridad de las fronteras de los Estados miembros a través de sus principales programas de financiación es de 4.500 millones de euros entre 2004 y 2020. El presupuesto de Frontex, la principal agencia de control de fronteras, aumentó un 3688% entre 2005 y 2016 (de 6,3 millones de euros a 238,7 millones de euros). La industria de las armas y la seguridad también ha conseguido captar gran parte de los 316 millones de euros de financiación destinados a la investigación en temas de seguridad.

“Es algo perverso e inmoral”, comenta Mark Akkerman, de la Campaña contra el Comercio de Armas de los Países Bajos y responsable de la investigación. “Las empresas que han contribuido a crear la crisis ahora se están beneficiando con la ‘segurización’ de las fronteras europeas. Puede que, con eso, garanticen la seguridad de los directores ejecutivos y los accionistas de las empresas de armas, pero por lo demás están agravando la inseguridad y el sufrimiento de los refugiados y las refugiadas.”

Además de poner al descubierto a las grandes empresas que se están beneficiando con la crisis de los refugiados, el informe también revela cómo las empresas de armas y seguridad ayudan a definir la política europea de seguridad de fronteras a través de grupos de presión, la interacción regular con las instituciones de la UE especializadas en fronteras y su papel determinante en la política de investigación. La Organización Europea para la Seguridad (EOS), de la que forman parte Thales, Finmeccanica y Airbus, ha estado muy activa defendiendo el incremento de la seguridad fronteriza. Además, muchas de sus propuestas, como la de crear una agencia paneuropea de seguridad fronteriza, han terminado materializándose en políticas reales (véase, por ejemplo, la transformación de Frontex en la Agencia Europea de Guardia Costera y Fronteriza, EBCG).

Por otra parte, se puede comprobar cómo en España también hay empresas que se benefician de la construcción de la Europa Fortaleza. Indra es un buen ejemplo, “una de las principales empresas tecnológicas españolas, con una importante facturación en seguridad y defensa, que sin duda se verá beneficiada de los enormes presupuestos europeos destinados a dar una respuesta de seguridad militar a la crisis de las personas refugiadas”, afirma Jordi Calvo, coordinador del Centre Delàs de Estudios por la Paz.

“La UE está cerrando la puerta a unas personas desesperadas que están huyendo de la guerra, pero parece que se la abre sin problemas a los fabricantes de armas que se lucran con la muerte y que ahora vigilan nuestras fronteras”, señala Nick Buxton, del Transnational Institute y revisor del informe. “Para poder solucionar realmente la crisis de los refugiados, primero debemos dejar de alimentar los conflictos e invertir el dinero destinado a las armas a ofrecer una ruta segura y un trato justo a los refugiados.”

Notas

•    El informe está embargado hasta el 4 de julio de 2016 y se podrá consultar en www.stopwapenhandel.org/borderwars y www.tni.org/guerras-de-frontera
•    Finmecannica ha cambiado recientemente de nombre y ahora se llama Leonardo
•    El resumen ejecutivo del informe se puede leer en español y catalán.


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