El paro aumenta en Córdoba en el segundo trimestre
Casi seis mil parados más respecto al primer trimestre del año, la tasa de paro se mantiene en el 30% desde primeros de 2015.
Los datos de la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre, dados a conocer hace unos días, muestran como el crecimiento del empleo continúa ralentizándose. Un dato que unido, a la reducción de las perspectivas oficiales de crecimiento, señala de forma inequivoca que la llamada “recuperación” sólo es el maquillaje de una realidad económica que sigue estancada en la crisis.
Así, aunque la tasa de personas ocupadas sube un 2,43%, ésta representa la menor subida desde el último trimestre de 2014. Se rompe, además, la tendencia de que el segundo trimestre es el mejor para el empleo, algo que venía ocurriendo desde 2014.
Si observamos los datos desestacionalizados, puede verse que la reducción del paro viene decreciendo desde el tercer trimestre de 2015 (un 3,80% de parados menos) hasta el actual 1,90%. Por su parte, un total de 1.147.900 personas han salido de la actividad este trimestre, es decir, que han perdido su trabajo, frente a las 1.130.600 que lo hicieron el mismo periodo de 2015 (es decir, 17.300 personas más).
Por otro lado, el número de asalariados con contrato temporal se incrementa este trimestre en 166.300 personas, casi el doble de los contratos indefinidos realizados, lo que eleva la tasa de temporalidad hasta el 25,72%.
A esto puede añadirse que en el último trimestre se han perdido 23.200 empleos públicos más y que el paro ha crecido entre los menores de 25 años en más de 22.000 personas.
Un panorama nada alentador, porque ahora que termina la etapa “dorada” de la supuesta recuperación económica, una de cada cinco personas dispuestas a trabajar, siguen en paro. Y porque, la inmensa mayoría del empleo creado en estos años es precario y en su mayor parte, promovido a través de las subvenciones o del abaratamiento del despido de las sucesivas reformas laborales.
En Andalucía, la situación es todavía peor. El índice de paro andaluz es un 9% superior a la media estatal, situándose en algo más del 29%. Casi la mitad más que en el conjunto del estado. Y eso teniendo en cuenta que el mayor descenso de activos (personas en situación de trabajar) en los últimos doce meses se ha dado en Andalucia, con una reducción de más de 75.000 personas. Según un estudio publicado recientemente y basado en los datos de la EPA, en nuestra comunidad tan sólo algo más de una de cada cuatro personas paradas percibe algún tipo de prestación, en concreto, el 28,2%. Por tanto, de los casi 1.160.000 parados andaluces, más de 830.000 no cobra nada actualmente.
En Córdoba, además, se invierte la tendencia estatal de ligero aumento del empleo, y en el pasado trimestre casi 6.000 personas se añadieron a las listas del paro, engrosadas en nuestra provincia por algo más de 115.000 personas. Un 30% personas en paro y más de un 32% en el caso de las mujeres, cifras que están estancadas en Córdoba desde el primer trimestre de 2015, recordando que existen en la actualidad el doble de personas en paro de las que había en 2008.
Y es que la “recuperación” no ha llegado a Córdoba. Una parte de esas personas que figuran en paro, tienen un trabajo sin contrato. Y una buena parte de los que están trabajando, lo hacen con un contrato en fraude de ley, ya sea con un contrato temporal que realmente es indefinido o con un contrato a tiempo parcial que se desarrolla a jornada completa. A esto se añaden otros muchos incumplimientos de la legislación laboral. Jornadas interminables y salarios miserables; categorías inferiores al trabajo realizado, falsos autónomos, incumplimientos en materia de descansos, vacaciones o permisos. Represalias contra los que protestan y persecución sindical. Gracias a esta realidad silenciosa se mantiene la economía de Córdoba. Por eso, todos los representantes políticos conocen esta situación, pero ninguno la denuncia.
Desde CNT queremos denunciar la situación en la que se encuentran las personas paradas de nuestra provincia, que en su gran mayoría no perciben ninguna prestación y que se encuentran abocadas, como única salida, a la búsqueda de un trabajo precario, con o sin contrato, con salarios de miseria y en el que las condiciones laborales prescinden, con total impunidad, de lo establecido en los convenios colectivos.
Fuentes:
Encuesta de Población Activa 2º Trimestre 2016.
Tasa de protección por paro según comunidad autónoma, sexo y edad. Enrique Negueruela Cortés,Técnico de empleo.