Brasil. La decisión del STF negando la libertad de Lula fue «victoria aplazada», evalúa el abogado

Los análisis sobre el resultado de la votación en la Segunda Clase resaltan el carácter político del caso.

La decisión de la segunda clase del Supremo Tribunal Federal (STF), negando por 3 votos a dos peticiones de libertad al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, generó dos tipos de análisis en los medios jurídicos. Las primeras resaltaron el carácter político -y por lo tanto extrajudicial- de la tramitación del caso en las cortes brasileñas. Las otras, observaron ligeros cambios en el tratamiento de la cuestión.

La Asociación Brasileña de Juristas por la Democracia (ABJD), resaltó en nota que el Supremo perdió la «oportunidad de mostrar independencia y respeto a los principios procesales constitucionales».

«Si las dudas persisten sobre el grado de implicación del juez, lo correcto sería que el reo esperaba el debate de fondo en libertad. La duda siempre será en beneficio del reo, dice nuestra doctrina «, dice el texto.

En un artículo que elabora una serie de posturas adoptadas por el STF, en términos individuales y colectivos, la profesora de Derecho Constitucional de la FGV-SP Eloísa Machado reforzó la idea de que el desenlace de la situación judicial de Lula no puede ser analizado a la luz del derecho.

«La historia muestra que el ‘caso Lula’ en el Supremo está marcado por excepcionalidades. ¿Y ahí, Lula va a ser suelto? «Argumentos jurídicos no prestan para responder a esta cuestión», dice el extracto del análisis publicado por la revista Piauí.

En el juicio del martes (25), el ex diputado federal y ex presidente de la OAB-RJ, Wadih Damous, resaltó, por otra perspectiva, cambios de postura ocurridos durante la sesión.

«Tuvimos una victoria aplazada. El resultado fue malo? Era. Pero él se da en un nivel completamente diferente. «Quien tiene intimidad con lide forense vio hoy que la defensa tuvo extraordinariamente derecho a la palabra, cosa que venía siendo negada de una manera perentoria, cuando se trataba de la defensa de Lula», dijo.

Damous se refirió al hecho de que Cristiano Zanin puede hacer sustentación oral en el primer caso juzgado en la sesión, lo que no estaba previsto regimentalmente. El ex parlamentario aún notó que incluso Carmen Lúcia, una de las más alineadas a la Lava Jato en la Segunda Clase, se mostró «receptiva a nuevas informaciones», haciendo referencia a los mensajes revelados por Intercept Brasil.

«Si no fuera así, habrían pasado el camino, como se dice vulgarmente, en ese habeas corpus. «Todavía vendrán nuevas revelaciones», complementó Damous.

Durante el juicio, acompañado por Brasil de Fato, fueron constantes las menciones a los reportajes del sitio que reveló conversaciones entre Sergio Moro y Deltan Dallagnol. En cierto momento, el ministro Gilmar Mendes defendió que la propia Fiscalía General de la República estaba en duda en relación con la imparcialidad del ex magistrado y ahora ministro de Justicia. Mendes manifestó ese entendimiento al hacer la lectura de fragmentos de la manifestación de Raquel Dodge al Supremo.

Entre los abogados que estaban en la sesión de la segunda clase escuchados por el reportaje, el voto de Celso de Mello, que era visto como el decisivo para la cuestión, fue interpretado como una señal de espera por nuevos desdoblamientos del escándalo de los mensajes. El decano de la Corte afirmó que su posición en relación a la petición de libertad de libertad no guardaba relación automática con su voto en relación al mérito del Habeas Corpus, que debe ser juzgado en el segundo semestre.

Posibilidades

Además del mérito sobre la sospechosidad de Moro, la defensa técnica de Lula tiene todavía una serie de caminos judiciales. El primero de ellos es la progresión del régimen. La cuestión es evaluada en este momento por el Tribunal Superior de Justicia. Un elemento que puede afectar esta vía es la posibilidad de condenación en segunda instancia en otro caso en la Lava Jato.

Otra acción que tiene impacto en la situación de Lula es una acción directa de inconstitucionalidad que cuestiona prisiones automáticas tras condenación en segunda instancia en el ámbito del Tribunal Regional Federal de la 4ª Región, que editó un acta que permite tales medidas. En caso de que la súmula sea derribada por el Supremo, el petista puede ser beneficiado.

Hay también las propias acciones que cuestionan la validez de prisiones después de condenación en segunda instancia, automáticas o no. El juicio de estos procesos ya fue postergado por el Supremo. Por último, tras el fin del tramo del recurso de Lula en el STJ, que redujo la pena del ex presidente, el caso llegará al STF a través de un recurso, procedimiento distinto de acciones como habeas corpus.

*Fuente, Brasil de Fato / Edición: Juan Pablo Soares