EU.- Elecciones.- Manipulación de las estadísticas
Normalmente las Estadísticas que presenta el gobierno de Estados Unidos están arregladas, de forma tal, de siempre mostrar un resultado positivo, aunque exista una difícil situación en la nación. El gobierno de Obama no es una excepción en este asunto y ahora , cuando las elecciones están cerca, se trata de ofrecer la mejor imagen posible para apoyar a la candidata demócrata.
Durante meses, la administración Obama, ha estado falseando las estadísticas relacionadas con el desempleo en Estados Unidos, rebajando el número de personas que forman la fuerza laboral y al sacar sobre esta el porciento de desempleo, poder mostrar una cifra que represente una buena situación económica para el país.
Sin embargo, es bastante difícil engañar a la mayoría de la población, sobre todo a los que no tienen empleo, los que siguen pasando necesidades y todos los meses tiene que recortar más y más lo que consumen, para poder continuar viviendo.
Una empresa encuestadora, la Marketplace Edison Research publicó los resultados de una investigación que realizaron sobre el asunto, la cual dio como resultado que el 71 por ciento de los encuestados plantearon que los resultaos que se publicaban sobre la economía estaban arreglados, principalmente para dar una buena impresión en la campaña electoral y recibir el mayor apoyo posible.
Cuando se fue al análisis del desglose de los resultados se conoció que una gran mayoría de los Afro Americanos, el 83 por ciento, consideraron que los resultados que se publicaban de la economía eran falsos, lo mismo plantearon el 80 por ciento de las personas comprendidas entre las edades de 18 a 24 años.
Por o regular todos consideraban que durante la etapa en que vivieron sus padres, la economía estaba en mejores condiciones, a la vez que expresaron era muy probable que durante la etapa en que viviera la próxima generación la situación fuera peor.
De acuerdo con los resultados de la encuesta, una cuarta parte de los entrevistados no habían tomado vacaciones en cinco años.
Un poco mas del 50 por ciento plantearon serios temores de que pudieran perder sus trabajos dentro de los próximos 12 meses.
El 71 por ciento de ellos declararon que tenían temor de enfermarse y tener que pagar una cuenta de cuidados médicos. El 53 por ciento consideraban que no podrían pagar los plazos de los préstamos recibidos. El 60 por ciento tenían temor de no poder pagar el alquiler del lugar donde viven.
Una tercera parte de los encuestados plantearon que la situación económica en que estaban viviendo en ocasiones no les permitía conciliar el sueño.
La encuesta arrojó como resultado que tanto Wall Street, como los bancos eran vistos por los encuestados de forma desfavorable.
El 60 por ciento de ellos coincidieron en que Wall Street actuaba de forma tal que perjudicaba a la mayoría de los estadounidenses en vez de ayudarlos. El 56 por ciento estuvo de acuerdo en que el gobierno de Estados Unidos debía ejercer mayor control sobre las operaciones de los bancos.
En cuanto a la pérdida de puestos de trabajo en la industria, el 54 por ciento consideró que era el resultado de los llamados Acuerdos de Libre Comercio más que consecuencia de cambios normales en la economía.
Estos problemas, donde se pone de manifiesto que los resultados de la economía están falseados, fueron mencionados y criticados por Bernie Sanders mientras hacía campaña electoral. Los que realizan estas manipulaciones con los resultados económicos, son los funcionarios de la administración Obama.
Aunque Hillary Clinton y Donald Trump han incorporado estos problemas a su campaña electoral y ambos plantean fórmulas que les permitirán solucionarlos, los encuestados también plantearon que no estaban satisfechos con ninguno de los dos candidatos y que sentían una gran frustración y falta de confianza en que esos problemas se solucionaran.
Al parecer, la economía continuará como un elemento manejado por las grandes corporaciones y el ciudadano estadounidense, el que está incluido en el 99 por ciento, no le queda otro remedio que continuar padeciendo, o decidirse a luchar en contra del padecimiento, en la forma que sea necesaria.