El profesorado de Formación Profesional altamente cualificado es la clave de la revolución en la FP
GRAN APUESTA POR LA FORMACIÓN PROFESIONAL EN ESPAÑA
El mercado laboral cada día es más exigente y cambiante, para adaptarse a las necesidades del sector productivo, necesita de profesionales cada vez más especializados y cualificados. El alumnado que decide cursar la Formación Profesional, hace una gran apuesta. Recibe formación que le capacita para el desempeño cualificado de la profesión, el acceso al empleo y la participación activa en la vida social, cultural y económica. Cuando termina sus estudios, consiguiendo su título de Técnico o de Técnico Superior, suele incorporarse al mundo laboral de una forma fácil y directa. Parte del alumnado que termina el Ciclo Formativo de Grado Superior, sigue apostando por la formación, y opta por la entrada en la universidad, para incrementar su formación y abrirse más puertas en el mercado laboral, entre ellas, la docencia. Además, es importante valorar que el alumnado de los ciclos formativos de grado básico logra también titular en la ESO directamente y obtener el título de Técnico Básico.
El éxito que el alumnado de Formación Profesional está teniendo, tanto en el sector productivo como en los resultados académicos cuando entran a estudiar en las universidades, se debe a la formación del profesorado de estas enseñanzas. Un profesorado altamente cualificado, que además de su formación universitaria, también cuenta con experiencia profesional en el mundo empresarial, y que muchos de ellos también eligieron como primeros estudios, la Formación Profesional.
La LOMLOE culmina el proceso de buscar la excelencia en el profesorado de Formación Profesional para responder a los actuales requerimientos profesionales, objetivo que comenzó la LOGSE en 1990 y que continuó la LOE en 2006. El Ministerio de Educación y Formación Profesional sigue apostando por la calidad de las enseñanzas. Por ello, está decido a ofrecer al alumnado de Formación Profesional un profesorado altamente cualificado. Se exige a este profesorado tener un Grado Universitario y Máster Universitario en Profesorado, además de competencias científico-tecnológicas en todos los sectores productivos, con dominio de las nuevas tecnologías, bilingüe y polivalente para adaptarse a los continuos cambios que el mercado laboral demanda y que prepare a un alumnado en competencias de innovación y emprendimiento, así como en materia de digitalización en su sector productivo que favorezcan su empleabilidad y desarrollo profesional.
El profesorado es algo más que un profesional competente en el saber hacer. Por eso el Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) apuesta como profesorado de referencia en la FP por personas con la más alta cualificación, con competencias profesionales del saber hacer, saber y saberser y estar, que enseñe con la fundamentación técnica, científica, económica y, en su caso, jurídica que requiere la economía y el empleo. Para la enseñanza de las técnicas profesionales se plantea la FP Dual, donde el futuro profesional se forma en la propia empresa, en un entorno real de trabajo y en contacto directo con el potencial empleador. También el MEFP, en la LOMLOE, abre las puertas a la necesidad de contratar a técnicos de FP, pero en este caso, el perfil profesional ideal sería con experiencia actualizada en la empresa, capaz de trasladar la realidad empresarial al aula. Por tanto, con la LOMLOE se intenta establecer las bases para una FP de máxima calidad, contando con el profesorado más cualificado para transmitir los conocimientos y capacidades que requiera la cualificación profesional al alumnado y pueda realizar las actividades profesionales requeridas en el sector productivo.
A las administraciones educativas, en muchos casos, les falta visión para potenciar la mejor FP, y prefieren lo cómodo, lo establecido del pasado. La LOGSE fue un gran paso para potenciar y valorar la FP, equiparó las enseñanzas de FP con las etapas básicas educativas, ESO y Bachillerato en los mismos centros. Apostó por el profesorado universitario para impartir los módulos profesionales, trabajando por competencias profesionales, enseñando con fundamentación científica, técnica, e incluso, jurídica.
Eliminó la separación teoría y prácticas en la FP, dejaron de denominarse profesorado de prácticas y de tecnología, tan nocivas desde el punto de vista educativo, simulando la realidad empresarial, con módulos profesionales donde el mismo profesorado imparte teoría y práctica, a tenor de los resultados de aprendizaje y criterios de evaluación que estén programados, para ser competentes profesionalmente en un entorno de trabajo.
Ahora la LOMLOE toma ese relevo en la ley de educación para continuar la proyección en España de la FP, necesaria si queremos mejorar nuestro desarrollo económico como país y nuestra proyección internacional.