Comunicado del PCE ante la crisis de gobierno
El Partido Comunista de España considera, que ante la situación de bloqueo institucional, con los problemas económicos y sociales que provoca llevar desde Diciembre de 2015 con un gobierno provisional, las fuerzas políticas y sociales tenemos la responsabilidad de plantear una alternativa coherente con lo que el electorado voto el 26 de Junio.
En estas elecciones concurrieron fuerzas políticas con propuestas programáticas que alcanzaron un número de escaños que hoy deben ser el eje sobre el que formulen las propuestas de gobierno.
Al mismo tiempo, desde el PP, se reclama su derecho a formar gobierno como fuerza más votada, lo que puede ser lógico en un primer momento lo que ya no es legítimo es que cuando las cuentas no le cuadran y no tiene el numero suficientes de diputados para formar gobierno, pidan al resto de Fuerzas Políticas que olviden sus compromisos electorales y les dejen formar gobierno, es decir quieren transformar la democracia parlamentaria en democracia plebiscitaria.
Al mismo tiempo, el PSOE mantiene su posición de no dar el voto a un Gobierno del PP porque le situaría enfrentado a gran parte de su electorado, pero a la vez se sitúa en una postura inmovilista y no se decide a plantear una propuesta alternativa sobre unas bases programáticas, este inmovilismo llevaría a mantener el bloqueo parlamentario y a una posible nueva convocatoria electoral.
En este escenario, desde el PCE ponemos de relieve, que si se ponen los distintos programas sobre la mesa encontramos que existen más de 176 diputadas y diputados a favor de cambiar la política que el PP ha llevado a cabo en los últimos cuatro años, como se ha expresado en la intervenciones y las votaciones de estos días en el congreso.
Por lo tanto es posible sumar una mayoría Parlamentaria en torno a un programa de mínimos, un programa que permita formar un Gobierno de progreso tal y como ya ocurrió en Portugal, en el que consideramos no se dan las condiciones para que participe IU.
Somos conscientes, de que todas las fuerzas, tendríamos que dejar aparcados puntos de sus programas, estamos dispuestos a ello en la medida que se reviertan políticas de recortes y austeridad, y en la medida que se recuperen libertades públicas que han sido anuladas por el PP, y que se abra una etapa de regeneración de la vida pública empezando por la puesta en marcha de una investigación parlamentaria sobre lo ocurrido en este país en los años del pelotazo y el despilfarro.
También conocemos de la dificultad de poner de acuerdo a fuerzas progresistas, de izquierdas y nacionalistas pero queremos hacer un llamamiento a la coherencia programática, a la lealtad con un electorado que reclama sobre todo, poner fin con las políticas del PP y revertir el daño causado en estos cuatro años.
Por ello, desde el PCE, queremos hacer un llamamiento a las fuerzas sociales, sindicales y ciudadanas, a todas aquellas y aquellos que desde las mareas y el activismo social ha confrontado con el PP, para que sean parte activa en conseguir este acuerdo, que sean facilitadoras de crear un cauce de diálogo que permita, al menos, explorar esta posibilidad, por ello sobre todo hacemos un llamamiento a quienes se han movilizado en defensa de los intereses de la mayoría social, frente al Gobierno de Rajoy para que retomen la movilización en defensa de un gobierno de progreso.
El Partido Comunista de España, trabajará en el seno de IU para hacer más que evidente que frente a una supuesta estabilidad que confirmaría un Gobierno de PP con el apoyo de C’s y permitido por el PSOE, existe la posibilidad del Gobierno de la coherencia basado en un acuerdo sobre las coincidencias que hoy pueden tener más de 176 diputadas y diputados, un Gobierno que ponga fin a las políticas antisociales, autoritaria del PP, que es en realidad lo que ha votado una mayoría del electorado.
En este sentido nos dirigiremos a todas las fuerzas parlamentarias, sociales, sindicales y ciudadanas para que se genere el espacio de dialogo y negociación que haga posible esta salida progresista a la actual crisis de gobierno, la vía portuguesa es un ejemplo que ponemos sobre la mesa con lealtad y sinceridad.