Cádiz, la trimilenaria, se hunde.
Y aunque geológicamente viene produciéndose no es de este hundimiento del que trata este texto, aunque pudiera parecer escandaloso el título. Si bien después de 40 años de transición democrática ¿alguien puede afirmar que la ciudad de Cádiz está mejor ahora que antes? Algunos detalles permiten otear la senda que si nadie lo remedia se encamina al abismo.
Unos datos que pudieran parecer desconectados permiten ir dimensionado la magnitud de una terrible situación. El primero: En agosto de 2020 un diario publicitaba que había algo más de 1500 pisos turísticos en la ciudad de Cádiz, más del doble de las plazas hoteleras. El segundo: En la actual escolarización sólo se han solicitado algo más de 130 plazas escolares de las más de 300 ofrecidas en el caso histórico, intramuros, de la ciudad. El tercero: el desempleo en Cádiz ciudad en la EPA (Encuesta de Población Activa) de marzo de 2021 era del 32,33%, lo que supone 15489 personas sin trabajo, de las 72.371 que forman el grupo de población entre 18 y 65 años de edad. ¿Es mucho o poco paro, comparado con los otros municipios de la provincia? El 32% se encuentra en medio de un intervalo que va desde el 43,08%, de la Línea de la Concepción, al 31,07 del Puerto de Santa María. Aunque “mal de muchos consuelo de…”. El cuarto: El Instituto Nacional Estadística informa que en 2019 el crecimiento fue también negativo produciéndose 659 defunciones más que nacimientos. Cádiz se mantiene como tercera ciudad de la provincia, tras Jerez y Algeciras, con 115.439 personas censadas, pasando a tener una población similar a la que tenía en 1960. ¿Viven todas en Cádiz? Buena pregunta que es posible responder analizando las solicitudes de escolarización. Considerando que en el centro de Cádiz se han inscrito menos de la mitad de las plazas ofertadas es más que probable que no todas las personas empadronadas en Cádiz residan en esa ciudad y que un conjunto de familias, con hijos censados en Cádiz ciudad, escolaricen en otras localidades cercanas, donde han podido vivir dada la mayor facilidad para acceder a una vivienda, ya sea en propiedad o alquiler. Los datos del padrón oficial revelan que Chiclana y Puerto Real ganan población en la Bahía de Cádiz. El dato de la carestía de la vivienda en Cádiz hay que introducirlo en el análisis y de ahí la nada despreciable cifra de 1500 pisos turísticos. Altos costos de viviendas en venta, altos alquileres, para una población que soporta algo más de un tercio de desempleo, van dibujando un panorama más que desolador que augura un futuro catastrófico muy próximo para esa ciudad.
El desmantelamiento industrial tampoco ayuda a corregir esta situación. Airbús es otra de las esperanzas amenazadas. Pero hay más: el ejército hace tiempo hizo mutis por el foro y las administraciones públicas, que contratan a un gran número de personal funcionario también están recortando su número. De las entidades bancarias para que hablar, cierre de numerosas sucursales en todas las barriadas de la ciudad. El buque insignia, la sede del Banco de España, cerró en 2004, iniciando así la debacle del sector. En Andalucía entre 2008 y 2017 los bancos han cerrado 2550 sucursales que representa un 36% del total. Entre 2018 a 2020 ese número se ha incrementado y no cesan los anuncios de cierre de sucursales y despidos masivos de personal laboral de ese sector azotado por las tan bien valoradas por la patronal “fusiones”. En la provincia de Cádiz se pasó de 794 sucursales, en 2008, a 490 en 2017. Se cerraron 304 que representa un 33% y se siguen cerrando a un ritmo frenético.
En el sector comercio Inditex también se ha “pirado” llevándose las tiendas Zara, en Columela, Lefties en la Avenida de las Cortes y le siguen Bershka y Massimo Dutti, ambas situadas en el casco histórico de la ciudad. Se rumoreó el cierre del Corte Inglés, que parece aguantará en la ciudad, una vez cerrada su sede en Bahía Sur.
La evolución de las tasas de natalidad y mortalidad desde 1941 confirman que 1995 fue el primer año donde ambas coincidieron en porcentajes y que a partir de esta fecha la tasa de mortalidad es superior a la de la natalidad. Un cuarto de siglo después la natalidad sigue bajando a un ritmo más que preocupante. ¿Por qué? Si no hay trabajo estable para las gentes en edad de crear familias y procrear, si poder acceder a una vivienda es una quimera en esa Ciudad, ¿Cuándo nacerán las siguientes generaciones? Los censos van dando avisos desde hace más de un cuarto de siglo, y si ningún gobierno lo evita… Cádiz se hunde sin remedio.