EEUU. Preocupación mundial por crímenes de odio, violencia racista y terrorismo supremacista blanco
Dentro de la condena internacional a los tiroteos en Texas y Ohio, que causaron 31 muertes y más de 60 heridos, los gobiernos de Uruguay y Venezuela recomendaron a sus ciudadanos que viajen a Estados Unidos extremar precauciones, mientras el presidente Donald Trump se vio obligado a denunciar lo que él mismo ayudó a fomentar: la violencia racista y terrorismo de supremacistas blancos.
Ante las críticas desatadas en Estados Unidos por la venta indiscriminada de armas y la ola de tiroteos masivos domésticos en los meses recientes, Trump tuvo que salir al paso en el tema y pidió, en una sola voz, condenar el racismo y la intolerancia. En México, el mandatario Andrés Manuel López Obrador consideró que el asunto debe generar un debate y reflexión, pues los ataques xenófobos no sólo lesionan a la sociedad estadounidense, sino también a la mexicana.
Aun cuando en sus primeros comentarios sobre los dos tiroteos masivos de este fin de semana que sacudieron a EEUU condenó las ideologías de odio, se negó a aceptar responsabilidad alguna en lo que ya muchos califican de grave problema de terrorismo doméstico de ultranacionalistas blancos en Estados Unidos.
“En una voz, nuestra nación debe condenar el racismo, la intolerancia y la supremacía blanca. Estas ideologías siniestras tienen que ser derrotadas. El odio no tiene lugar en Estados Unidos», leyó Trump un comunicado redactado por sus asesores, de manera seca y sin gran emoción.
Tras los atentados en El Paso y Dayton, los analistas estadounidenses recordaron que Trump ignoró las advertencias de que sus palabras estaban invitando a la violencia de esta naturaleza y rehusó reconocer que los crímenes de odio y actos de terrorismo doméstico vinculado con la supremacía blanca se han incrementado durante su presidencia, según datos de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI).
Algunos analistas de medios gráficos, radio y televisión recordaron que durante las últimas semanas Trump intensificó sus ataques abiertamente racistas contra legisladores federales minoritarios y sus comunidades, acusándolos de traición y repitiendo sus frases favoritas sobre la invasión de inmigrantes latinoamericanos, el mismo vocabulario usado por el atacante de El Paso.
En mayo, en medio de un mitin político en Florida, Trump preguntó: ¿Cómo podemos parar a esta gente?, en referencia a los migrantes, y uno de sus fanáticos gritó: disparen contra ellos. El presidente respondió sólo con una risita.
La cancillería uruguaya aconsejó evitar lugares con grandes concentraciones de personas, (parques temáticos, centros comerciales, festivales artísticos, actividades religiosas, ferias gastronómicas o manifestaciones culturales o deportiva, ante la violencia indiscriminada, en su mayor parte por crímenes de odio, entre los cuales están el racismo y la discriminación.
Estos crímenes costaron la vida de más de 250 personas en los primeros siete meses de este año en EEUU, y las recomendaciones de la cancillería uruguaya se dan ante la imposibilidad de las autoridades estadounidenses de prevenir estas situaciones de violencia debido a la posesión indiscriminada de armas de fuego por la población, añadió.
Estos crecientes actos de violencia han encontrado eco y sustento en los discursos y acciones impregnadas de discriminación racial y odio contra las poblaciones migrantes, pronunciados y ejecutados desde la élite supremacista que detenta poder político en Washington. En las 250 muertes reportadas un factor fundamental la indiscriminada posesión de armas de fuego de la población, fomentada también desde el centro del gobierno federal de ese país, añadió.
En Bruselas, Mina Andreeva, vocera de la Comisión Europea, expresó que la comunidad está “consternada por los terribles acontecimientos este fin de semana en EEUU”, y condenó “con firmeza los tiroteos en masa que están destrozando vidas y comunidades en todo el mundo”. Amnistía Internacional consideró la violencia armada en Estados Unidos una manifestación de la crisis de derechos humanos.
El jefe de gobierno español, Pedro Sánchez, tuiteó: “mi solidaridad con el dolor del pueblo mexicano. La matanza de El Paso es el resultado del discurso del odio. El criminal buscó a sus víctimas por su procedencia. Racismo en estado puro que condeno y lamento con toda la fuerza de la razón y del corazón”.
*Economista del Observatorio de Estudios Macroeconómicos (Nueva York), Analista de temas de EEUU y Europa, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)