Al-Hakam Morilla Rodríguez •  Opinión •  11/02/2018

‘Democracia’ de unto y procesión

«Artículo 35: Cuando el gobierno viola los derechos del pueblo, la insurrección es para todo éste y para cada porción, el mas sagrado de los derechos y el mas indispensable de los deberes». Constitución francesa de 1793
 
 
¡Qué levanten la mano los pardillos que crean que Unidos Podemos y Ciudadanos, si alcanzasen el gobierno del Estado, no cometerían las mismas tropelías de facinerosos por las que se ha caracterizado la castuza bipartidista estos últimos cuarenta años! Convenimos en que al menos los dos primeros podrían obtener más el beneficio de la duda, sólo con carácter previo, a pesar de que algunos dimisionarios del partido de Falangito Rivera le hayan acusado de ‘procedimientos propios de la Gestapo’ y ambos ya contemplen en algunas autonomías casos puntuales de corrupción que han procurado atajar, para que la sedicente ‘oposición’ – a las poltronas – no los airee.
 
Mantienen la presunción de inocencia porque no han tocado todavía el máximo poder españolista, en Moncloa, a no ser como eventuales comparsas en la escenografía de la Partidocracia que nos sojuzga. Y por supuesto la magnitud de su podredumbre no se puede comparar con las de las formaciones de la Gürtel y los EREs, por mucho que se esfuerce en darle al ventilador de las defecaciones malolientes la crepuscular y desacreditada prensa centralista mesnadera. Si bien con estos mimbres ‘orgánicos’ de un totalitarismo rampante se presenta un panorama muy poco halagüeño.
 
Sorprende el cinismo de que los nuevos partidos postulantes al Banco Azul, en apariencia celosos de hacer unas primarias o procesos electivos con garantías en sus propios partidos, cuando se trata de vindicar la defensa de una verdadera democracia para el conjunto del Estado pierden fuelle, y sus ‘prima donnas’ o gallitos de pelea se tornan fláccidos, hueros… Por supuesto los mass media jacobinos apenas rechistan, rehenes de la ‘publicidad institucional’ que se gestiona con peor estilo y arbitrariedad que las cuentas del gran capitán.
 
¿Alguien recuerda que fue de UPyD, ese partido ultraespañolista que competía en el mismo nicho que el veleta naranja Ciudaenanos? Qué raro, desplegaba una gran actividad parlamentaria, y tenía una implantación estatal y representación en el Hemiciclo de Madrid. Eso sí, como Esquerra Republicana, y salvando las abismales distancias, no estaba salpicado por casos de corrupción. ¿Cómo pueden seguir tolerando los ciudadanos que depositen sus ahorros, nóminas, bonos o acciones en los mismos bancos que condonan deudas a partidos políticos podridos? ¿No se dan cuenta de que por financiar a la mugre encastada, esas mismas entidades y ellos mismos se vuelven cómplices de la deriva totalitaria y expolio de lo público, con casi impunidad total, que sufrimos?
 
Lo sentimos muchos, ‘Arfonzosdalescaña’ de las colonias, ha resucitado, con irresistible ímpetu, el interés por el genial sistema que desarrolló Montesquieu de la Separación de los Tres Poderes en Origen, Ejercicio y Funciones, la Democracia. Ante todo son FORMAS, procedimientos transparentes y garantistas, donde quien la hace, en especial administrando los impuestos de todos, la paga. Lo observamos en las comunidades de vecinos, sin ir más lejos. Apaguen sus receptores o pantallitas de ordenador, desde donde mendruguillos de los partidos o ‘sindicatos’ subvencionados por el Estado – negros o colorados -, u oblados clerical-franquistas en general, se esfuerzan de modo organizado en fabricar estaditos de opinión parafascistas rojipardos, y dense una vuelta por su barrio o pueblos vecinos, si no viven en una ciudad. Se percibe con nitidez meridiana que donde se han implementado medios democráticos elementales, el portal y la fachada de algunos bloques están más limpios, con un correcto mantenimiento; o esos pueblecillos del mundo rural mantienen una presencia más digna, que invita a residir allí o animar a su visita. Muy al contrario sucede donde no son capaces de llamar a la civilidad a los paisanos desaprensivos, bien de buen grado llamándoles a una democracia participativa, o ‘a fortiori’ vía legal.
 
Naturalmente no puede soslayarse la responsabilidad de la autodenominada ‘comunidad educativa’. ¿Cuántos colegios conocen que instruyan a los niños en la importancia de solucionar diferencias mediante el debate abierto y el voto secreto? Puede parecer engorrosa la labor, pero donde adquiere relieve una auténtica democracia, horizontal, en diversos ámbitos, al final la práctica totalidad tira para adelante, porque al menos les han permitido expresarse y plantear sus objeciones, aunque hayan quedado en minoría. Nos sume en la perplejidad e indignación que un número abrumador de docentes apenas se esfuercen en este encomiable esfuerzo. El ordeno y mando, el autoritarismo animado desde el Ministerio que les paga – a costa de los contribuyentes -, puede parecer más eficaz en momentos extremos, pero usado por hábito a la larga pasa factura. Por eso se dan cada vez más casos de acoso escolar y hace poco ya hasta ¡la violación de un crío por otros algo más mayores! Si no cumplen su labor los docentes de cimentar por la cultura una auténtica democracia, pilar de cualquier Pueblo civilizado, hoy día disponemos de los medios telemáticos para ahorrarnos decenas de miles de enseñantes, a los que lo único que parece importarles, con servilismo, es chupar nóminas con el mínimo esfuerzo y presumir de poder adquisitivo entre parias.
 
Si ya nos vamos a la Sanidad nos entran sudores fríos, como al reo de muerte ante las escaleras que le conducen al cadalso. Os invitamos a que sigáis los vídeos en youtube de Spiriman. Al lado de la realidad el cine negro o las películas de terror provocan hilaridad. Cargos elegidos por dedazo, en función de que lleven el carnet en la boca o sean sumisos sin tener cualificación administrativa o económica algunas, una ‘economía paralela’ de arrimados y golfería tercermundistas que causan espanto, porque su ineptitud y presuntas irregularidades cuestan muertes de inocentes a diario (sin salir de Andalucía una mujer violada en la sala de espera de un hospital, o cadáveres en las mismas tirados en urgencias durante horas, negligencias por saturación de pacientes o por la ordenanza encubierta de no derivar a especialistas…). Como sucede en el gremio de los profesores, al no menos corporativista de los sanitarios les han otorgado desde el Consejo de Ministros y la Autonomía el rango de ‘autoridades’. Como si los gravísimos problemas que arrastra la Educación y la Sanidad se solucionasen llevando revólveres y estrellitas de sheriff.
 
Hemos advertido también en otros artículos de lo que denunciara Jueces para la Democracia: la tercera parte del Poder Judicial podría estar infiltrado por la declarada ‘secta destructiva’ en Bélgica, el Opus. ¿Aquí no se regulan los ‘lobbies’ que pudieran dinamitar la indispensable independencia de los magistrados y fiscales, en función de la posible obediencia al jerarca de un dictatorial Estado teocrático extranjero romano (creado por Mussolini)? ¿Con inventarse alevosamente ‘delitos’ por protestas pacíficas de figuradas ‘sedición’ o ‘rebelión’, ampliar la ‘prisión provisional’ sine die, escupir a su propia sacrosanta ‘constitución’ atropellando la Libertad de Expresión y demás felonías indignas… ya vamos servidos en el Cortijo del señorito rojigualdo? ¿Quo vadis, ‘santos inocentes’, a esperar que alguien se tome la ‘justicia’ por su mano, se organicen otra vez bandas armadas o se fabriquen montajes parafascistas para legitimar en vano este estado de excepción permanente que padecemos? ¿Otra vez dejaremos desbocada la violencia y espolearemos el crimen cuarenta años después del Caso Scala (reconocido como sangriento montaje por un tribunal español para fumigar el Movimiento Libertario)…?
 
‘Concursos’ o licitaciones amañados, ofertas de empleo de quitaypón en los tablones, nepotismo, premios de fidelidad a feladores o felatrices del enchufado/a, barata propaganda de supremacismo sexista para encubrir o distraer tensiones crecientes de clase… No se trata de darse autobombo por los media como tantos obscenos políticastros de profesión, de aparentar ‘santidad’ o de nauseabunda demagogia populista. Debemos garantizar mecanismos de control democráticos, empezando por un estricta Separación de Poderes, prohibir con urgencia las listas ‘ad hoc’, cerradas o abiertas,  blindadas por las camarillas de partidos, y que cualquier político pueda ser revocado de su responsabilidad sin esperar ni un año, en caso de incumplir los fines para los que fue elegido. Y para los que ‘legislan’ en caliente a golpe de titular… ¿qué, no se lleva en vez de hacer de paladines desfaciendo entuertos de la página de sucesos, implementar una ley que duplique la pena por abuso de confianza contra el político o administrador aprovechados que gestionando lo Público se hubiesen lucrado, o detraído fondos para otros fines donde no cuesta trabajo descubrir a camaradas, parientes o testaferros, obligando a los hipócritas malhechores a abonar lo defraudado con intereses, o haciendo que paguen entre rejas, sin que quepa prescripción alguna?
 
Nada de nada, los sinvergüenzas amorales no escuchan, mientras les rebosa la faltriquera, instalados en sus privilegios. Llamamos a los que no son cobardes súbditos y sicarios de esta barbarie, a todos los ciudadanos de conciencia por encima de etiquetas ideológicas o estatus a una resistencia pacífica activa en todos los foros, en las plazas, en cualesquiera asambleas… ¡Boicotead a la arrogante hez autoritaria en todos los frentes, porque nos va la Vida y la Dignidad en ese noble empeño!
 
¡VIVA AL-ANDALUSÍA LIBRE: DEMOCRÁTICA, LAICA Y REPUBLICANA!

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