Venezuela y Cuba un ejemplo de dignidad para el mundo

Venezuela y Cuba un ejemplo de dignidad para el mundo.

Eduardo Galeano dijo: «Ahora América es, para el mundo, nada más que los Estados Unidos: nosotros habitamos, a lo sumo, una sub América, una América de segunda clase, de nebulosa identificación.»

Eso es algo contra lo que lucharon los verdaderos patriotas de América, Hugo Chávez, Simón Bolívar, Sandino, Emiliano Zapata, Pancho Villa, Che Guevara, Fidel Castro, y tantos otros patriotas que jamás aceptaron que Latinoamérica fuese el patito trasero de nadie.

Los EEUU nunca se han dedicado a exportar democracia, se dedican a poner títeres en el poder que sirvan a sus intereses, no importa que sean dictadores sanguinarios mientras defiendan los intereses de las multinacionales Yanquis.

«Los Estados Unidos parecen destinados por la Providencia a plagar la América de miserias en nombre de la libertad», dijo Simón Bolívar.

Sobran ejemplos en América y el mundo, Guatemala, Granada, El Salvador, Chile, o la destrucción de Estados como Iraq, Libia o Siria.

Cuba y Venezuela se mantienen firmes defendiendo su soberanía y su dignidad apesar de sanciones, bloqueos, injerencias, y una oposición traidora y vendida a los intereses Yanquis.

Eduardo Galeano también avisó que «Cada vez que Estados Unidos ‘salva’ a un país, lo deja convertido en un manicomio o en un cementerio».

El Imperialismo Yanqui no construye nada, lo destruye todo, no busca nada más que la rapiña de recursos energéticos de otros países, no conoce la lealtad porque ve al mundo como algo que le pertenece, sus aliados son sus subalternos, sus satélites, sus perros falderos. El símbolo de los EEUU no debería ser un águila imperial sino un buitre carroñero que se alimenta de los cadáveres de pueblos y naciones enteras.

EEUU hace negocio con la violencia, con las armas, tanto provocando guerras y vendiendo armas para que otros se maten, como dijo Joe Biden «lucharemos hasta el último ucraniano», hasta que los traicionemos y nos repartamos sus riquezas con Rusia acaba la frase Donald Trump.

En términos de armas, EE UU es un caso atípico. Tiene el 4% de la población mundial con el 40% de las armas del planeta.

Cuando la oposición venezolana pide una intervención militar de los EEUU contra su propio pueblo comete un acto de alta traición, además que demuestra lo poco o nada que le importa su propio pueblo al pedir que la potencia más violenta del planeta destruya Venezuela para quedarse con sus recursos energéticos, porque basta con saber leer para conocer cuáles son los objetivos de los Yanquis cada vez que invaden una nación.