Palabras de Corina en la puerta del 28
“Tuve un acompañante con el que compartí un secreto, o eso creímos hacernos creer, y para unirnos en familia de negocios admitimos intercambiar un sobre en el que debía constar nuestra firma comprometiéndonos, pero viviendo separadamente y pareciendo durante un tiempo que no teníamos que ver uno con otro, y quien resultase rico primero llamaría a la otra parte.”
(Yo estaba escuchándola como médico, su relato, el que he comenzado a contarles aquí, me hizo sonreír irónicamente al recordarme un cuento de Ambrose Bierce, ¿ha leído usted aquél en el que un padre y un hijo ladrones se asocian para colaborar y repartirse el botín?, se titula Una conflagración imperfecta.
Volvamos a la declaración de Corina, ¡cuánto fracaso manifiesta en sus palabras! ,
¡cuánto! ¡cuánto! ¡no hay cifra que pueda reflejarlo!
Una asociación y otra la han llevado a verse ante el espejo, y en un estado de devaneo hacer un examen global de su frustración. Dejo aquí su testimonio para el estudio, y también lo dejo a la vista de todo el mundo porque considero que los afectados, aunque la conocen, son los primeros que tienen derecho a disponer de su declaración. Sigamos entonces.)
“Él se quedó en Caracas y en una jugada vació parte del bolsillo del Estado, se llevó un gran pedazo con las refinerías y otros asuntos, ¿y qué pasó conmigo?, procuró compañías acordes con lo que agarró. Yo me dejó con su sobre pero no lo abrí, fui a Miami. Nos habíamos dicho que ibamos a afligir a los que no se iban dejándonos todo, y por eso buscamos para escarnecerlos a otros hampones y empleamos a uno con aspecto de perdonavidas. Fue el que llevo el mensaje: “os damos 8 días para rendiros”. El que picó la puerta con la pistola le llaman Caracortada, la tiene comida por la viruel y pone ohjos duros de buitre. Me sorprendió saber al momento que no asustó ni una pizca, ni siquiera tuvo respuesta, y como un polluelo fue aleteando a un vecino para pasarle el mismo cuento buscando su miedo para hacerle unirse a él. Aquél vecino, tras escucharle, le señaló la puerta de la calle haciéndole saber que era menos que un sabueso, con lo que a mí se me hundió en la cabeza del plan un puño de fracaso, ¡otro!
Entonces pensé en el recurso de mas armas y más “caracortadas”, así es como se hace para desalojar a los pobres de cualquier parte, luego era realizable el desahucio de ese pobrerio hambriento desobediente. Y los gañanes enviado, arrampantodo, dispuestos a llevarse cuanto despojo les cupiese, quemaron, aterrorizaron, asaltaron las costas, … y sumaron fracasos aun mayores que los anteriores y sangrientos, despertando a los idiotas. Desde entonces me habita y me hierve la duda de si mis intentos requerían que yo misma trocase la cara del Caracortada por la mía misma. Y ahora me consume la duda peor, lo que constituye el principio sobre aquel escrito de compromiso para reunirnos y repartirnos las riquezas pretendidas, la duda que se me revuelve por dentro, angustiosa interrogante, ¿no será que su sobre está vacío? ¿sabrá que el sobre que le di a la espera del éxito, no tenía nada dentro?
Como quiero que mi juego siga en blanco, para no hacerme sufrir con tanto fracaso, uno tras otro, he dispuesto a un anciano como un mendigo para hablar a los habitantes firmes de Venezuela, le he dado un discurso con las clásicas promesas, semejantes a aquella del sobre que le dí al otro y él me dio, el secreto prometido que no tenemos ninguno de los dos, ¡más oscuro no puede ser!
El anciano que he dispuesto al que llamo Ed, irónicamente suena en mis sienes la “d” sustituida por una “z”, y me huele a hez, sí, hez, y le llamo como un martillo en mi cabeza ¡Hez!, y con su fracaso veo que me cae encima, cubriéndome por entero como un mundo del que no consigo nada, es ese mundo, lo veo, ¡lo veo! Ese en el que viven los resistentes, los pobladores comunes que hoy aún son más fuertes y más maduros.”
Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de AMANE. Miembro de la Asociación Europea de Apoyo a los Detenidos Palestinos. Miembro de la Red de Artistas, Intelectuales y Comunicadores Solidarios con Nicaragua y el FSLN. Colaborador del canal Antiimperialistas.com, de la Red en Defensa de la Humanidad.